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El terrorismo golpea al empresariado vasco

Urkullu a ETA: "Aquí me tienen, pero dejen en paz a los demás"

El PNV ha recibido el mensaje que ETA le mandó con el asesinato del empresario y simpatizante peneuvista Ignacio Uria: vamos a por el "Partido del Negocio Vasco", como denominan los terroristas y la izquierda abertzale al PNV. Y el presidente peneuvista, Iñigo Urkullu, lejos de arrugarse, dio ayer un paso al frente para decirle a ETA que deje en paz a los empresarios. "Si tiene al PNV en el punto de mira como el partido del negocio, aquí está el presidente del EBB [la Ejecutiva], el máximo representante del PNV. Aquí me tienen, pero dejen ustedes a los demás", recalcó en Radio Euskadi. Urkullu y otros líderes del PNV se han implicado este año en convencer a las empresas de la importancia de acometer la obra del AVE vasco y aguantar el tirón.

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El paso al frente de Urkullu y las sucesivas declaraciones de consejeros del Gobierno vasco -"nos vamos a dejar la piel", es la frase más repetida desde el Ejecutivo- intentan hacer sentir arropados a los empresarios acosados por el chantaje terrorista, en particular, a los constructores de la Y ferroviaria. La hostilidad de ETA hacia el PNV no ha parado de crecer. En su asamblea virtual celebrada este año, los etarras discutieron la conveniencia de atentar contra los nacionalistas, el último Rubicón que le queda por cruzar a la banda. Algunas reflexiones suenan ahora casi proféticas: "Todo el partido es malo, la cuestión es cuándo, cómo y dónde dar... Puede haber un montón de maneras para hacerlo. Dar a personas inmersas en el mundo de la corrupción o a empresarios, hacer una especie de discriminación con el impuesto, darles a sus empresas...". De hecho, los dos empresarios asesinados por ETA desde 2000 (José Mari Korta e Ignacio Uria) tenían profundas convicciones nacionalistas. "Deje en paz a los empresarios", clamó Urkullu, "a la clase empresarial vasca, ya sea por esta obra, como por la necesidad que pueda tener de recabar fondos económicos" con el impuesto revolucionario.

El PNV, que siempre ha censurado la Ley de Partidos, reiteró su negativa a la excepcionalidad legal para echar a ANV de las alcaldías. Urkullu habló de "oportunismo" al referirse a las medidas legales proyectadas por Zapatero y vaticinó que no van a "traer un clima para la deslegitimación del terrorismo".

Iñigo Urkullu.
Iñigo Urkullu.
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