_
_
_
_
_

Mitsubishi se la juega

Con el Volkswagen de Sainz al mando del Dakar, la marca japonesa se apresura a evolucionar su gran apuesta, un nuevo motor diésel

Oriol Puigdemont

Mitsubishi lleva ganados de forma consecutiva los últimos siete rally Dakar en coches. Sin embargo, este año es más vulnerable que nunca frente a Volkswagen y BMW, las otras dos grandes escuderías, que afrontan la carrera con el apoyo directo de sus fábricas madre. Mientras la mayoría de los participantes embarcaron sus vehículos en buques y llegaron por mar a Buenos Aires, las tres formaciones oficiales optaron por transportar los suyos en avión, un método más seguro pero mucho más costoso. Este detalle permite tomar perspectiva del agravio que hay entre unos competidores, los que se toman esta cita como un desafío personal, y los otros, que van a por la victoria y no reparan en gastos.

Más información
Coma campa a sus anchas por la Patagonia

En ese afán están enfrascados en Mitsubishi, que tienen mucho tajo por delante. Por primera vez, el constructor japonés ha equipado sus coches con un propulsor diésel, para tratar de beneficiarse de las ventajas mecánicas que eso supone frente al de gasolina. De hecho, la marca nipona lleva un año evolucionando un coche completamente nuevo. El Mitsubishi Racing Lancer ha sido construido con un único propósito: arrebatarle a Volkswagen el honor de conquistar el Dakar con un coche propulsado con gasoil. Nani Roma, que este año disputa su cuarto Dakar al volante de un Mitsu oficial, explica el motivo de este cambio. "El problema que teníamos con el coche gasolina era que, con las restricciones mecánicas actuales [prohibición de turbo], estábamos en inferioridad con Volkswagen". El propulsor a gasolina permite un régimen de giro muy alto y poca potencia en bajos (respuesta inmediata al pisar el acelerador), mientras que el de gasoil ofrece mucho más par (potencia a bajas revoluciones) y, en contrapartida, penaliza en régimen de giro. "Los técnicos de Mitsubishi concluyeron que, en un Dakar entero [más de 9.000 kilómetros], apenas circulábamos a fondo durante diez minutos. El que debía ser nuestro punto fuerte, la velocidad punta, no era tan decisivo; pero sí necesitamos potencia en bajos para salir de las dunas o pasar una trialera", argumenta el catalán.

Tras las tres primeras etapas, el líder en coches es Carlos Sainz, seguido de Nasser Al Attiyah, a poco menos de cuatro minutos. El qatarí ganó ayer su segunda etapa al volante de un BMW que circula como un disparo. "Ya sabíamos que los BMW y los Touareg [Volkswagen] correrían mucho porque llevan cuatro años evolucionando su motor diésel y corre más que el nuestro", asegura Lucas Cruz, copiloto de Roma; "pero la parte más dura de la carrera aún está por llegar". Sainz no se fía: "El Mitsubishi es un coche más moderno que el nuestro, y sabemos que va rápido. La incógnita es saber si les va a dar algún problema o no".

Clasificación de la tercera etapa. Motos. 1. Coma, 5h 18m 17s. 2. Ullevalseter (Nor.), a 17m 49s. 3. Viladoms, a 17m 49 s. General:

1. Coma, 10h 31m 49s. 2. Fretigne (Fra.), a 39m 11s. 3. Ullevalseter (Nor.), a 42m 25s. Coches. 1. Al Attiyah (Qat.), 4h 29m 27s. 2. Sainz, a 36s. 3. Deeping (Ale.), a 1m 40s. General: 1. Sainz, 9h 4m 48s. 2. Al Attiyah (Qat.), a 3m 40s. 3. De Villiers (Zaf.), a 5m 45s. 4. Peterhansel (Fra.), a 8m 47s. 5. Roma, a 14m 22s.

Carlos Sainz, ayer a bordo de su Volkswagen.
Carlos Sainz, ayer a bordo de su Volkswagen.AP
Vídeo: DAKAR

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_