Guardiola: "No es momento de parar"
El Barcelona comenzó ayer más de 100 jugadas de ataque; remató en 21 ocasiones, diez de ellas entre los tres palos; marcó cinco goles, recuperó la pelota 46 veces, sólo cometió ocho faltas -casi todas, en situaciones de peligro cero para Valdés, que en los 90 minutos únicamente recibió un remate del Deportivo- y se combinó bien en 448 pases. "No ha sido un partido perfecto. Ellos han jugado mucho por dentro en la primera parte y el equipo ha sido muy largo", matizó, sin embargo, Pep Guardiola.
Miguel Ángel Lotina aseguró que los suyos habían colaborado en la exhibición. "Lo lógico es que el Barça te gane, pero hemos hecho poquitas cosas bien. Hemos sido muy blanditos y ellos han jugado demasiado cómodos. Excesivo respeto. El fútbol no es el parchís. No hay que dar patadas, pero sí buscar el contacto", dijo. Y añadió: "En el descanso les he dicho a mis jugadores que, si seguíamos así, el Barça nos invitaba a cenar".
El Barça lo hizo casi todo bien ante los 65.145 aficionados que oficialmente acudieron al Camp Nou. "Se agradece su presencia. Es un placer ver a la gente y que disfrute", dijo Guardiola, que hoy cumple 38 años. El técnico utilizó ayer a nueve futbolistas que no estuvieron en el campo el miércoles contra el Atlético. Sólo ha repetido la alineación dos veces en 19 jornadas. Dice que el rendimiento es consecuencia del espíritu que mueve al equipo, de la voluntad por hacer las cosas bien desde el esfuerzo. "Lo que me reconforta es el espíritu de este equipo", convino. Ayer sumó 50 puntos con los tres del último partido de la primera vuelta y supera así el récord establecido el curso pasado por el Madrid de Bernd Schuster (47): "Es un pasito más. No es momento de parar. Quedan 57".
Con la victoria sobre el Depor, el Barça lleva 17 partidos consecutivos de la Liga sin perder (dos empates y 15 triunfos). Se acerca así al registro de la temporada 1973-74, cuando estuvo 26 seguidos invicto. La mejor marca corresponde al Madrid: 28 en la de 1988-89.
