Ángel Luna, detrás del giro del PSPV
Los socialistas no lo consideran un giro de posición, pero lo cierto es que la opinión del partido sobre el último informe europeo que condena el urbanismo salvaje ha variado con respecto a los dos anteriores. Los dos primeros los apoyaron, pero rechazan el tercero.
La crisis económica, especialmente virulenta en el sector de la construcción, condiciona y mucho la posición de los partidos políticos. También la oferta de pacto que el dirigente socialista Jorge Alarte ha lanzado al presidente Francisco Camps para consensuar un nuevo modelo territorial y, sobre todo, el deseo de los nuevos dirigentes del PSPV-PSOE de ofrecer una imagen de partido responsable y capaz de gobernar esta comunidad.
Y detrás de este giro o movimiento está el portavoz parlamentario en las Cortes Valencianas, Ángel Luna, quien al día siguiente de conocerse el contenido del informe Auken, anunció que el partido, que condenó en anteriores ocasiones el urbanismo valenciano ante las instituciones europeas, se opondrá a este tercero. "El informe está desfasado. Habla de todo menos de urbanismo y encierra un ataque indiscriminado al Estado de derecho Español", dijo el parlamentario socialista tras conocer su contenido.
Pocos días antes, Luna se había reunido con el consejero de Medio Ambiente de la Generalitat, José Ramón García Antón, para reanudar los contactos con vistas a la reforma de la Ley Urbanística Valenciana (LUV), por la que claman no sólo los eurodiputados de Bruselas sino un amplio número de profesionales valencianos que la consideran farragosa y difícil.
Hoy Luna insiste, al igual que el entorno de Alarte, en que no existe tal cambio de posición. Que los socialistas no rebajarán sus críticas contra el modelo urbanístico que promueve el Consell ni contra la LUV porque no lo comparten. "Alarte ofrece un pacto a Camps en torno al territorio porque entiende que si no hay pacto, el desastre seguirá, pero considera desastroso el actual modelo de crecimiento", explicaron.
El debate en torno a la posición de los socialistas valencianos ha quedado fuera del debate de la dirección del partido, se ha dirimido entre el secretario general del partido y su portavoz parlamentario. "Es una colección de barbaridades", reiteró ayer Ángel Luna
