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Noa llena en Vigo y entusiasma a un público entregado

La cantante israelí confesó que echaba de menos a Carlos Núñez

Al filo del segundo bis, la artista israelí Noa confesó al público de Vigo lo mucho que había echado de menos en ese concierto a su amigo Carlos Núñez, con quien interpretó el tema A lavandeira da noite, composición incluida en uno de los discos del gaiteiro vigués así como en el álbum Noa Gold (2003). "La próxima vez que vuelva intentaré coincidir con él, pero hoy no pudo ser". El público ya se había puesto en pie para aplaudir a esta mujer que agotó las entradas del Teatro Salesianos en su segunda visita a Vigo, esta vez con la Fundación Caixa Galicia.

La artista no se atrevió a interpretar en solitario su canción en gallego, pero hizo otros regalos a su rendida audiencia, como un homenaje a Serrat y el tema central de la película La vida es bella, interpretado en español. Fue el colofón a una noche dedicada a su último disco, Genes&Jeans (2008), pensado como un viaje musical desde sus raíces familiares en Yemen, hasta su país natal, Israel, pasando por Estados Unidos, donde pasó su niñez y adolescencia.

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Descalza y vestida de blanco al inicio del recital, la artista se presentó como recién salida de un viaje en el tiempo y demostró lo bien que le sienta la tradición, por encima de los arreglos occidentales que acercan buena parte de sus discos a los resbaladizos vericuetos del new age. Rodeada de un trío (Gil Dor en las guitarras y en la dirección musical, el batería Gari Sedi y Gil Zohar, al piano y bajo eléctrico), al frente de las percusiones, bailando danzas populares e incluso ataviada con un tocado oriental, una enérgica Noa entretejía los hilos de cientos de siglos y de su propia genealogía con una clara intención de convertir su música en portadora de un mensaje trascendente, sobre todo dirigido a la zona del planeta en la que habita. Y esa es la razón expresa de su participación en la próxima edición de Eurovisión, donde representará a Israel junto a la cantante palestino-israelí Mira Awad.

"A estas alturas de mi carrera, el concurso no supone un interés artístico especial, pero sí es una plataforma a través de la que millones de personas escucharán nuestro mensaje. Vamos a interpretar la música que nos gusta y, sobre todo, hablaremos de paz y de convivencia. Incluso en tiempos tan difíciles como éstos, debemos reafirmar nuestro convencimiento de que el diálogo es la única vía de supervivencia en Oriente Medio y en cualquier parte del mundo", decía Noa mediante correo electrónico días antes de salir de su casa en Tel-Aviv. Es probable, además, que la reunión con Awad no se quede en anécdota y fructifique en un disco conjunto.

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