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PSE y PP forcejean por el reparto de sus tres puestos en la Mesa del Parlamento

La popular Laura Garrido se perfila como nueva presidenta de la Cámara

La presidencia del Parlamento y otro puesto, la secretaría primera, es lo que el PP está pidiendo a los socialistas en la negociación sobre la composición del órgano de gobierno de la Cámara, vinculada a su apoyo a la investidura de Patxi López como lehendakari. El PSE-EE encuentra excesiva la pretensión del PP de contar con dos de los tres puestos que sumarían entre ambos partidos en la Mesa del Parlamento, máxime si uno de ellos es la presidencia.

La negociación entre ambas formaciones ha entrado en un tira y afloja en torno a esa cuestión, en la que los populares pueden verse finalmente en la tesitura de optar entre la presidencia o los dos puestos en la Mesa. Esta segunda opción supone renunciar a que se visibilice su contribución al relevo del nacionalismo en la representación institucional, pero da al PP más poder sobre los socialistas, que quedarían con un solo voto, el de la presidencia, en el órgano de gobierno del Legislativo.

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El PP esgrime como argumento que en los dos mandatos que el PSE ha tenido la presidencia de las Juntas Generales alavesas, gobernando la Diputación los populares, ha contado también con la secretaría primera.

Los socialistas están dispuestos a votar para la presidencia de la Cámara la candidatura que el PP le proponga, con la sola condición de que sea euskaldún. Pero en ese caso el PP debería apoyar los candidatos del PSE a la vicepresidencia y la secretaría primeras. Los otros dos puestos de la Mesa, la vicepresidencia y la secretaría segundas, serán inexcusablemente, por el modo de votación, para el PNV, o para este partido y la cuarta fuerza del Parlamento, Aralar, si los peneuvistas quieren cederle el último cargo.

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De auparse el PP con la presidencia de la Cámara, es prácticamente seguro que la ocuparía uno de sus electos por Álava. Es una reivindicación de su organización territorial, que ha tenido siempre a Carmelo Barrio en la Mesa, como premio a la aportación de seis parlamentarios al grupo. Vizcaya lleva seis y Guipúzcoa sólo tres.

El nombre de Barrio salió a la palestra hace unos días por boca del predecesor de María San Gil en la presidencia del PP vasco, Carlos Iturgaiz. Sin embargo, la persona que cuenta con más posibilidades para sus-tituir a la peneuvista Izaskun Bilbao es la parlamentaria alavesa Laura Garrido, por delante de su compañera guipuzcoana Arantza Quiroga. Garrido es de la plena confianza del secretario general del partido, Iñaki Oyarzabal, que fue el primero en levantar la voz contra la actuación de San Gil, y domina el euskera. Además tiene la experiencia en un órgano de gobierno semejante, al haber sido vicepresidenta en la Mesa de las Juntas Generales de Álava.

El PSE-EE y el PP se reúnen hoy de nuevo con la propuesta formal y por escrito de los populares sobre la mesa. Ésta recoge no sólo sus aspiraciones respecto del órgano de gobierno de la Cámara, sino también las otras cuestiones programáticas. Pero sobre estas hay un mayor margen para la negociación, dado que López no será investido y formará Gobierno hasta principios de mayo, pero la composición de la Mesa debe quedar despejada a fecha fija: el 3 de abril se constituye la Cámara.

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