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Halladas desde España tres nuevas rocas celestes

Desde España se están descubriendo más asteroides que desde cualquier otro país del mundo, con la excepción de EE UU, líder en este campo. La "culpa" la tienen los tres telescopios ópticos robotizados que ha instalado en La Sagra (Granada) el Observatorio Astronómico de Mallorca. Todas las noches que el tiempo lo permite, estos instrumentos barren el cielo y todo lo que encuentran en movimiento es analizado inmediatamente por los programas de ordenador elaborados por los astrónomos y técnicos del observatorio, programas que se encargan también de descartar cualquier cuerpo celeste ya conocido.

Este proyecto integral de búsqueda empezó a funcionar en 2008 y ya está a pleno rendimiento, explica Salvador Sánchez, director del observatorio. Detecta planetas menores de hasta 10 metros de diámetro (se ven como puntitos que se desplazan por el cielo sobre el telón estático de las estrellas). En lo que va de año han descubierto 500, de los que tres se acercan a la Tierra periódicamente y serán, por tanto, vigilados.

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La amenaza viene del espacio

Aunque pueda parecer extraño, cuando se observan cuerpos celestes que llevan millones de años recorriendo el sistema solar, cada noche la prisa es protagonista. "Nosotros estamos en el primer eslabón en la cadena de vigilancia de los objetos potencialmente peligrosos para la Tierra", explica Jaime Nomen, encargado del programa de búsqueda. Este primer eslabón es la observación y una primera estimación de la órbita y del tamaño del objeto. Luego otros expertos calculan si se va a acercar en algún momento a la Tierra, y, por último, en caso de alta probabilidad de impacto, llegaría la decisión sobre posibles maniobras de desviación para evitar el choque.

Órbitas extrañas

"Analizamos los datos la misma noche, para detectar los objetos que muestran órbitas extrañas (entre un 1% y un 2% de los observados) porque, si no, corremos el riesgo de detectar algún asteroide con un riesgo alto de impacto y no darnos cuenta a tiempo", justifica Nomen. "Enviamos estos datos sospechosos enseguida al Centro de Planetas Menores, la base de datos mundial, que los comunica inmediatamente a los observatorios participantes para que hagan el seguimiento cuando amanezca en España". La primera estimación del tamaño está basada en el brillo observado y se refina después. Además, se envían los datos de objetos ya conocidos para refinar la base de datos. Este año se han realizado 150.000 de estas medidas, además de los 500 descubrimientos. El Gobierno balear es el principal financiador del proyecto.

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