Obama avisa del deterioro del empleo a corto plazo
Barack Obama no quiere cantar victoria en la batalla contra la recesión. Es más, admite que a pesar de los incipientes signos de recuperación, como el repunte en el consumo, el crecimiento no será suficiente para que se creen más empleos de los que se destruyen. "Seré claro: el empleo no va a registrar una mejora considerable en los próximos meses. Podría empeorar, incluso", remachó.
Obama, consciente del riesgo que supone decir que las cosas van bien cuando el paro crece y está a punto de superar la barrera del 10%, concedió ayer cinco entrevistas televisadas. En la emitida por la CNN dijo que sólo dará por concluida la recesión cuando se creen empleos netos. Y en sus propias palabras, la situación del mercado laboral no mejorará hasta entrado 2010.
La tasa de paro se situó en agosto en el 9,7% (466.000 desocupados adicionales), tres décimas más que en julio y el doble que a comienzos de la recesión. Es el nivel de desempleo más alto desde junio de 1983. El total de parados asciende a 14,9 millones, de los que 7,4 millones se atribuyen a la crisis. Desde diciembre de 2007 se han perdido 6,9 millones de puestos de trabajo.
El factor demográfico
El presidente cree que "se está generando empleo" en EE UU. Pero sacó a colación el factor demográfico para justificar por qué no se observará una mejora en las estadísticas. "Se necesitan 150.000 puestos de trabajo adicionales cada vez sólo para mantener el ritmo con el crecimiento de la población", explicó el presidente, que echó la vista atrás a enero, cuando se destruyeron 743.000 empleos.
"Hemos perdido tantos empleos que recuperarlos va a requerir de unas tasas de crecimiento realmente altas", insistió Barack Obama, que habló de "indicios de que la economía vuelve a expandirse". El presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, dijo el martes que la recesión está "técnicamente" acabada, aunque admitió que la debilidad de la economía se hará sentir durante un tiempo.
Los economistas proyectan un crecimiento anualizado del 2% en el tercer trimestre, y en el cuarto, un punto por debajo del potencial. El Banco Central estadounidense se reúne el martes y el miércoles para revisar su estrategia monetaria. Wall Street cree que se mantendrán los tipos de interés entorno al cero hasta el próximo verano.
