Apagón informático
El ajetreo en el Ayuntamiento de Benidorm fue ayer constante. Los concejales que estaban en el gobierno ocuparon los despachos de la oposición, y viceversa. A primera hora de la mañana, el PP mostró su malestar porque en sus nuevas dependencias había papeles y estaban sucias. El nuevo alcalde, Agustín Navarro, pidió disculpas y ordenó a los suyos retirar sus pertenencias. Pero los problemas surgieron a la hora de conectar los ordenadores, limpiados por el equipo saliente. El departamento de informática empleó la mañana en configurarlos para sus nuevos usuarios y en volver a instalar todo el software y la conexión a Internet. El proceso supuso la pérdida de información, como documentos y archivos personales, pero también datos de carácter institucional o de agenda.
El alcalde, Agustín Navarro, intentó ser conciliador y mantener las formas. Dijo no tener queja de la "herencia" que había recibido porque "lo esencial debe estar". Pero por ejemplo, los contactos o citas pendientes del alcalde han desaparecido. "Ahora llega el 9 d'Octubre y desconozco a quién se invitaba", dijo Navarro que ha pedido información a todas las concejalías.
El nuevo gobierno repetirá durante los próximos días las reuniones con el resto de concejales a primera hora de la mañana para acabar de perfilar el equipo. Una de las primeras decisiones será modificar el proyecto de remodelación del antiguo edificio consistorial del Torrejó, en primera línea de la playa de Levante, para poder ubicar en la azotea una terraza black & white con la finalidad de recibir invitados.
