_
_
_
_
_
FRANCIA | Las cuentas del Estado para 2010

Del 'escudo' para ricos a la tasa de la gasolina

Antonio Jiménez Barca

Nicolas Sarkozy, presidente de la República francesa, persiste en el lema de su campaña electoral: a él no le han elegido para subir impuestos. De hecho, no levantó el denominado escudo fiscal, aprobado en 2007, una suerte de protección que evita que un francés, por muy rico que sea, pague de impuestos más de la mitad de sus ingresos anuales.

Pero Sarkozy ha creado la tasa carbono, un impuesto que a partir de enero gravará las emisiones de gases a la atmósfera: la gasolina, el gas y el fuel costarán más a partir de 2010. Una recaudación extra frente al desbocado déficit público que superará el 8% del PIB este año, cuando la previsión de Bruselas lo limitaba al 6,6%.

También, recientemente, el Gobierno de Sarkozy ha anunciado que cobrará a los trabajadores de baja por accidente, hasta ahora exentos de pagar impuestos.

Más información
Entre lo peor y lo pésimo

La economía francesa se recupera poco a poco de la crisis. El PIB ya crece, lo que Sarkozy atribuye al plan de reactivación emprendido hace un año, con una inversión de 26.000 millones. La izquierda lo juzgó (y lo juzga) insuficiente y añade que la ayuda a bancos fue muchísimo más cuantiosa.

Con todo, el paro seguirá creciendo, del 9,7% actual al 11,2% que pronostica la OCDE para final de 2010.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Antonio Jiménez Barca
Es reportero de EL PAÍS y escritor. Fue corresponsal en París, Lisboa y São Paulo. También subdirector de Fin de semana. Ha escrito dos novelas, 'Deudas pendientes' (Premio Novela Negra de Gijón), y 'La botella del náufrago', y un libro de no ficción ('Así fue la dictadura'), firmado junto a su compañero y amigo Pablo Ordaz.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_