Obama pide a España que trabaje por la paz en Oriente Próximo

José Luis Rodríguez Zapatero inició ayer en Siria una gira de tres días por Oriente Próximo -que hoy le llevará a Israel y los territorios palestinos ocupados y mañana a Jordania y Líbano- con el encargo del presidente Barack Obama de intentar desbrozar el camino para desbloquear el proceso de paz. Si quedaba alguna duda, el ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, lo dejó claro: "Nos aseguró que quiere trabajar con España, no sólo como próximo presidente de la UE, sino con España como país que tiene buenas relaciones, que tiene influencia en esta zona. Sí, traemos el encargo de ayudar, de apoyar, de acompañar los esfuerzos de la Administración [estadounidense]", contestó Moratinos cuando se le preguntó si Obama les pidió alguna gestión durante la reunión del martes en la Casa Blanca.

Hoy mismo, el ministro conversará telefónicamente con el enviado del presidente estadounidense en la región, George Mitchell, para "mantener un esfuerzo coordinado y complementario". ¿Qué puede aportar España en el diabólico rompecabezas de Oriente Próximo? "Somos un país que genera confianza", dijo Zapatero, tras subrayar el "valor añadido" que supone la experiencia y la agenda de contactos acumulada por Moratinos durante sus siete años como enviado especial de la UE en la región.

Fuentes gubernamentales indicaron que se trata de que España empuje a aquellos actores, como Siria, con los que ha mantenido una relación fluida incluso en momentos en los que estaba aislada internacionalmente. Siria puede influir en la milicia chií Hezbolá para que se forme un gobierno en Líbano, lo que está pendiente desde que la coalición prooccidental ganara las elecciones de junio; o en Hamás, para que acepte el acuerdo de reconciliación palestina que ya ha firmado Fatah, el partido de Mahmud Abas. Tras la reunión que Zapatero mantuvo con el presidente sirio Bachar El Assad, su ministro de Exteriores, Walid Moallem, apoyó la formación "cuanto antes" de un gobierno de unidad nacional en Líbano, pero eludió pronunciarse sobre la actitud de Hamás.

En declaraciones a la cadena Al Jazeera, Zapatero reivindicó las gestiones discretas de España. "Hemos trabajado y actuado en muchos frentes en la zona. Otra cosa es que hayamos querido tener un protagonismo excesivo. Pero se sabe que en lo que afecta a Siria, Jordania o Palestina, España ha jugado un papel determinante. La tarea en Oriente Medio es discreta, prudente, y desde luego se recurre a España muchas veces. España hace su trabajo y lo que importa es que salgan los frutos", declaró.