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Exteriores pide que los activistas no estén con delincuentes en la cárcel

El PSOE acudirá a la vista que se celebrará mañana en Copenhague

La situación de los cuatro activistas de Greenpeace detenidos durante la cumbre climática de Copenhague ha provocado ya la intervención del Ejecutivo y el partido del Gobierno. El Ministerio de Exteriores de España ha solicitado que sean separados del resto de presos comunes, con quienes fueron mezclados ayer en la prisión danesa de Vestre Faengsel, según anunció Greenpeace.

El PSOE, por otro lado, calificó de "desproporcionadas" las medidas aplicadas contra el director ejecutivo de Greenpeace España, López de Uralde, y anunció que su secretario de Medio Ambiente, Hugo Morán, viajará hoy a Copenhague para acudir a la vista que se celebrará mañana. Ese día se decidirá si se prolonga o no la prisión preventiva para los cuatro activistas. Si finalmente se celebra a puerta cerrada, mantendrá un encuentro con los representantes de Greenpeace desplazados a Dinamarca.

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Tanto Morán como la secretaria de Política Internacional del PSOE, Elena Valenciano, expresaron ayer en un comunicado su "preocupación" por el líder ecologista López de Uralde y señalaron que las medidas judiciales impuestas son "desproporcionadas" porque "los hechos que se van a juzgar son de muy escasa gravedad".

Los socialistas pidieron a las autoridades danesas "una pronta solución" del caso; recordaron que no se encuentran ante una acción terrorista, unos hechos estrictamente delictivos o que hayan generado alarma social, sino ante hechos "de muy escasa gravedad"; y reclamaron que la respuesta judicial esté en consonancia con las dictadas en otros países de la Unión Europea ante actos similares.

La organización Amnistía Internacional (AI) se pronunció ayer en términos parecidos y señaló que la detención de los activistas de Greenpeace más allá de mañana sería una decisión "desproporcionada e injusta".

AI recordó en un comunicado que los activistas están acusados de violar varios artículos del Código Penal danés a pesar de que la acción que llevaron a cabo fue "en todo momento pacífica" y legítima y que "no pretendía atemorizar ni amenazar a nadie, ni obtener un beneficio personal".

El comunicado puntualiza además que los activistas pertenecen a una organización "mundialmente reconocida" que ha ofrecido información a la policía sobre la acción y que siempre ha asumido "plenamente" la responsabilidad de sus acciones.

Por todo ello, Amnistía espera que el juez valore adecuadamente todas estas circunstancias y libere a los detenidos el próximo jueves, "independientemente del proceso penal a que hubiere lugar". La organización señaló que "seguirá con atención el curso de los acontecimientos".

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