_
_
_
_
_

Ultimátum a Montilla sobre Ascó

Esquerra e Iniciativa exigen al PSC que diga 'no' al almacén nuclear

Jesús García Bueno

El silencio y la ambigüedad del PSC ante la posibilidad de que Ascó (Ribera d'Ebre) acoja un almacén nuclear irrita a sus socios de gobierno. Esquerra Republicana (ERC) e Iniciativa per Catalunya (ICV) están hartos de la estrategia del avestruz por la que han optado los socialistas catalanes en un asunto espinoso que, a pocos meses de las elecciones, amenaza con convertirse en un factor extra de desgaste. Los dos partidos tratan de abanderar el frente antinuclear y ayer exigieron al presidente de la Generalitat, José Montilla, que se pronuncie con claridad en contra del proyecto.

El líder de los ecosocialistas, Joan Herrera, quiere que el no del presidente se produzca más temprano que tarde. De hecho, dio una fecha que puede interpretarse como ultimátum. "Exigimos que de aquí al martes se garantice que ningún ayuntamiento catalán opta al cementario nuclear". Ese día, Ascó celebrará un pleno extraordinario para aprobar su candidatura a acoger el almacén temporal de residuos nucleares.

CiU sostiene ahora que apartará al alcalde de Ascó si apoya el proyecto
Más información
Unas 3.000 personas y los líderes de ERC e ICV se manifiestan en Ascó para rechazar el almacén nuclear
Espinosa: "La decisión sobre el almacén es de los ayuntamientos"

Herrera atacó a CiU: "Son hipócritas. Dicen que no quieren el almacén, pero un ayuntamiento suyo hace posible que [Ascó] sea candidata". A pesar de que los convergentes gobiernan en el municipio con el apoyo de un concejal del PSC -que previsiblemente votará a favor del proyecto-, el líder de ICV no aludió a los socialistas, aunque recordó que su partido "liderará la respuesta institucional" contra el almacén.

En su blog, el número dos de la coalición rojiverde fue más allá: "Si el Gobierno no se opone, sería motivo de nuestro abandono del Gobierno". ICV considera, en cualquier caso, que si el presidente de Castilla-La Mancha, un socialista como José María Barreda, se opone a la candidatura de Yebra (Guadalajara), con más razón debe hacerlo el tripartito, una de cuyas patas es netamente ecologista.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Aunque el Gobierno catalán tiene poco que decir en las candidaturas -que se presentan al Ministerio de Industria-, el presidente de ERC, Joan Puigcercós, insistió en la necesidad de que el Ejecutivo se pronuncie. Puigcercós afirmó que si Montilla no se pronuncia, su partido le preguntará "en la sesión de control del Parlament del miércoles". Esquerra argumentó que Tarragona -que ya acoge tres reactores, dos en Ascó y uno en Vandellòs- "no puede convertirse en un monocultivo nuclear".

Los socios minoritarios en el Ejecutivo redoblarán hoy la presión sobre Montilla con una presencia generosa -liderada por Herrera y Puigcercós- en la manifestación que más de 40 entidades ecologistas celebran en Ascó.

El PSC ve como las trincheras vuelven a levantarse en el seno del tripartito, pero por ahora mantiene un calculado mutismo y hace como si el asunto le fuese ajeno. En realidad intenta ganar tiempo con la excusa, expuesta en su última ejecutiva, de que es un asunto municipal y, por ende, poco puede decir.

Convergència i Unió, por su parte, se mueve en un mar de dudas, lo que le ha valido ser la diana de todas las críticas. El jueves, Felip Puig garantizó al alcalde de Ascó, Rafael Vidal, que podía dormir tranquilo aunque propugnara la candidatura del municipio, a pesar de que la posición oficial de los nacionalistas es contraria al almacén. Ayer, el número dos de los nacionalistas cambió de criterio sin que se sepa por qué: anunció que, si Vidal sigue adelante, le suspenderá de militancia. Si la supuesta amenaza surte efecto, Puig habrá librado al tripartito, sin quererlo, de una sangrienta batalla interna.

La trayectoria errática de CiU no sólo se da con Ascó, sino con asuntos radiactivos en general. En el debate de política general, su líder, Artur Mas, abogó por la energía nuclear, asumiendo los costes electorales que comporte. El PP catalán fue el único grupo que se expresó ayer claramente a favor de la energía nuclear, aunque su presidenta, Alicia Sánchez-Camaho, eludió decir si, en su opinión, Ascó debe ser la sede del almacén de residuos.

Más información en la página 36

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Jesús García Bueno
Periodista especializado en información judicial. Ha desarrollado su carrera en la redacción de Barcelona, donde ha cubierto escándalos de corrupción y el procés. Licenciado por la UAB, ha sido profesor universitario. Ha colaborado en el programa 'Salvados' y como investigador en el documental '800 metros' de Netflix, sobre los atentados del 17-A.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_