Todos los grupos del Senado presentan un "consenso básico" sobre la salida de la crisis

En una rueda de prensa inédita por la presencia conjunta de PSOE y PP que, como mínimo, rompe la imagen de frontal desacuerdo entre Gobierno y oposición de los últimos días, todos los grupos del Senado presentaron ayer el primer documento conjunto que se ha firmado hasta ahora con una hoja de ruta para salir de la crisis. Se trata del informe final de una ponencia creada para analizar la crisis y posibles soluciones, y el resultado fue presentado ayer como un "consenso básico" y un "documento de trabajo" para que sirva de base a las negociaciones del Gobierno en el palacio de Zurbano.

Aunque el trabajo y sus conclusiones son anteriores a la decisión del Gobierno de crear una comisión negociadora, coincide en señalar algunos de los principales planteamientos que se han puesto sobre la mesa en la búsqueda de un pacto de Estado, como son potenciar el ICO, racionalizar la Administración y fomentar la rehabilitación de viviendas.

El informe se cuida de no hacer más que un catálogo de problemas a solucionar, pero sin entrar en concretar políticas ejecutivas, como se pretende en Zurbano. De esa forma, puede recomendar "llevar a cabo los cambios regulatorios necesarios para asegurar la solvencia y eficiencia" de las cajas de ahorros; o también "incrementar las inversiones públicas" en infraestructuras, especialmente en los ejes mediterráneo y cantábrico; o "avanzar y profundizar en la flexiseguridad" del mercado de trabajo.

Es decir, que el acuerdo presentado en el Senado es sobre qué hay que hacer, pero el cómo es competencia de otras mesas de negociación, como la del palacio de Zurbano. Las conclusiones del informe se entregaron ayer a la Vicepresidencia Segunda y a los representantes de los partidos en las negociaciones.

Otra clave para saltarse las diferencias partidistas es que las recomendaciones no provienen de los partidos, sino de 22 comparecientes que pertenecen a la elite económica de España, entre ellos los líderes de sindicatos y patronal, presidentes de los lobbies automovilístico y de construcción o expertos del mundo académico. El senador del PP José Manuel Barreiro, quizá entendiendo que la firma de su partido es la más sorprendente, quiso "subrayar que se trata de un documento de estudio que no recoge la posición de ningún partido. Recoge las percepciones de los comparecientes". Barreiro lo presentó como un "documento de reflexión".

Quizá los puntos más incisivos del informe no estén en las recomendaciones sino en el análisis de la crisis, en el que los partidos asumen frases que no es fácil escucharles. Por ejemplo, el documento señala que España "podría suscitar dudas en los inversores internacionales que sería necesario despejar cuanto antes" y por ello dice que las acciones para la "reducción del gasto público improductivo y la reducción de la deuda pública (...) deberían ser más firmes". Y añade que "de lo contrario podría prolongarse el deterioro económico que venimos padeciendo".

El informe es el resultado de más de un año de trabajo de la ponencia creada a iniciativa del senador de CiU y presidente de la Comisión de Economía del Senado, Jordi Vilajoana. La comisión aprobará hoy este informe, previsiblemente por unanimidad.