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"El Ejecutivo debe traer el marco, pero no pintar el cuadro"

No todos salieron contentos de las más de cuatro horas de reunión entre los consejeros de Economía y Hacienda de las comunidades autónomas y la vicepresidenta segunda del Gobierno, Elena Salgado. Algunos de los representantes del Partido Popular mostraron su malestar porque el Ejecutivo les hubiera impuesto un fuerte ajuste para recortar el déficit sin marcarles objetivos concretos, es decir, sin especificar dónde deben meter la tijera.

Incluso el consejero de la Generalitat de Cataluña, el socialista Antoni Castells, se sumó a estas quejas. "No todos partimos del mismo punto del déficit, las comunidades autónomas no son un problema como insinúa la caverna mediática", aseguró. "Nosotros ya hemos hecho los deberes".

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Desde las filas conservadoras, el consejero valenciano, Gerardo Camps, incidió en esa misma idea: "Las comunidades autónomas no somos culpables del despilfarro".

La vicepresidenta segunda dejó claro después de la reunión que no es potestad del Gobierno central dictar al detalle qué tipo de medidas deben tomar las autonomías para lograr el objetivo pactado de contención del déficit. Citó para ello unas palabras del consejero de Cantabria: "Corresponde al Gobierno de España traer el marco, no pintar el cuadro".

Castells pide coherencia

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Cataluña ha solicitado que "se usen de forma coherente" los instrumentos del Estado que afectan al recorte de gasto pedido a las autonomías. Castell aseguró: "Contener el gasto no depende de nosotros solos. Muchas funciones en materia de sanidad, educación o asuntos sociales dependen de la normativa básica del Estado".

La vicepresidenta segunda explicó con un ejemplo en qué consiste la adenda añadida al acuerdo a petición de la Generalitat catalana. Salgado hizo referencia a los acuerdos a los que el Estado debe llegar con los sindicatos sobre el aumento (o congelación, si fuera el caso) de las retribuciones de los funcionarios, que se trasladan a las comunidades autónomas.

"No es un cambio normativo sobre leyes vigentes", quiso dejar claro la vicepresidenta, y en ningún caso afectará al salario de los trabajadores públicos, según dijo, porque esta cuestión se fija año a año en los Presupuestos Generales del Estado.

En cualquier caso, Castells ha valorado lo que considera una "señal de madurez": "Europa pone condiciones difíciles pero lo vamos a hacer".

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