La incertidumbre afecta a todo el sistema euro
Los mercados de la periferia europea volvieron a sufrir ayer las consecuencias de las tensiones a que Alemania está sometiendo al concepto de "unión". Mientras las cotizaciones caían con fuerza en esos mercados, algunos inversores afirmaban que esto demostraba que Europa es una moneda y poco más.
El Ibex 35 sufrió su segunda caída en importancia de este ejercicio, con el 4,19%, mientras que la Bolsa de Lisboa perdía el 5,36% y la de Atenas el 6,00%. Al tiempo, en los mercados de deuda pública, la rentabilidad del bono español a 10 años llegaba a alcanzar el 4,09%, mientras que el alemán recibía los beneficios de la gran incertidumbre que se ha creado y su rentabilidad bajaba hasta el 2,94%.
La ausencia de apoyos reales a Grecia ha abierto grandes incertidumbres sobre otros países y, sobre todo, ha despejado el camino a la especulación, que juega a la baja con la deuda pública sin temor a equivocarse. Lo peor de todo es que la incertidumbre sobre algunos miembros ha terminado por contagiarse al conjunto del sistema, con lo que también ayer las Bolsas de París y Francfort acabaron sufriendo fuertes descensos al no poder eludir el concepto de área euro.
Para el mercado español, la situación se ha vuelto muy preocupante al perder el Ibex 35 sus soportes más fiables, en buena parte arrastrado por el sector bancario por la pérdida de valor de sus carteras de deuda pública. Algún gran banco de negocios ha afirmado que los poseedores de deuda pública griega podrían sufrir una quita de hasta el 30%, lo cual puede no ser verdad, pero indica por dónde se mueven los criterios del mundo de las finanzas. La contratación en el Mercado Continuo se mantuvo casi en los niveles del día anterior, con 5.356,49 millones de euros, aunque las operaciones del mercado abierto registraron un importante incremento ante la necesaria absorción de papel que tuvieron que hacer los cuidadores de los grandes valores. Estas operaciones sumaron 3.320,78 millones de euros, de los que el 60% se concentraba en los tres principales valores del mercado: Banco Santander, Telefónica y BBVA.
La situación, totalmente descontrolada, según muchos inversores, puede llevarse por delante el esfuerzo de consolidación de los últimos meses y situar al mercado otra vez en los niveles de febrero.
