Los alcaldes socialistas reivindican a Blanco frente al líder del PSM

La arremetida del líder de los socialistas madrileños, Tomás Gómez, contra el vicesecretario general del PSOE, José Blanco, en la reunión de la ejecutiva de este lunes ha abierto una fuerte crisis en el Partido Socialista de Madrid (PSM). "Nunca ha pasado nada parecido", coinciden varias voces del partido.

Algunos alcaldes de los grandes municipios del sur, y en especial los afectados por el soterramiento de las vías del tren, cerraron ayer filas en torno al ministro de Fomento (quien anunció la futura obra en el mitin del 25 de abril en el que ninguneó a Gómez). Los regidores de Fuenlabrada, Manuel Robles, y de Leganés, Rafael Gómez Montoya, recordaron que ese soterramiento es una aspiración histórica.

Otros 23 ediles socialistas firmaron una carta de apoyo al líder del PSM

El regidor de Villalba acusó a Gómez de anteponer sus intereses al partido

A última hora, otros alcaldes del partido, encabezados por el de Alcorcón, Enrique Cascallana, hicieron un comunicado de apoyo a Gómez subrayando que el PSM "está trabajando bien con su líder a la cabeza". Esta especie de manifiesto de apoyo lo firmaron 23 regidores socialistas, incluido Pedro Castro, de Getafe o Jesús Dionisio, de Aranjuez.

Pero otras fuentes socialistas del sur se quejaron de lo inoportuno del líder del PSM al arremeter contra el ministro de Fomento y acusarle de trabajar en favor de la presidenta Aguirre. "Ha montado una bronca innecesaria en un momento en que necesitamos estar muy unidos. Es incomprensible que se hable de esto cuando nuestro enemigo es el PP", destacaron dirigentes socialistas.

"Necesitamos caminar todos juntos y respetar los plazos que ha marcado el Comité Federal

[para nombrar a los candidatos electorales]. Una vez más [Tomás Gómez] se ha precipitado", añadieron otras fuentes.

Los críticos con la gestión del secretario general del PSM cargaron las tintas contra él y le pidieron un cambio de rumbo. En caso contrario, aseguran tener personas dispuestas a presentarse a unas primarias frente a Gómez para lograr la candidatura a la Presidencia de la Comunidad. El alcalde socialista de Collado Villalba, José Pablo González, no precisamente afín a Gómez, le pidió que "rectifique" sus críticas a Blanco, que considera "injustas y desproporcionadas". "¿Enfrentarse con Ferraz y La Moncloa?", se preguntaba ayer González. "Es una barbaridad, anteponer los intereses personales a los del partido".

Preguntado por si es partidario de buscar otro candidato a presidente de la Comunidad, el regidor respondió que hay que respetar el calendario y el criterio del secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, que ha pospuesto la decisión hasta finales de septiembre u octubre.

Óscar Blanco, diputado madrileño y portavoz de la minoritaria Plataforma Socialista por el Cambio, fue más allá en los ataques al secretario general del PSM.Dejó claro Óscar Blanco que, aunque están dispuestos a negociar, "es necesario un cambio de liderazgo", que puede llegar del propio Gómez o de alguien ajeno. "Pero, si el que tiene potestad para cambiar de estrategia no lo hace, habrá que cambiar de liderazgo". Para el cambio subrayó: "Tenemos gente que ha manifestado su voluntad de presentarse a primarias".

De "estériles" calificó estas polémicas el portavoz socialista en el Ayuntamiento, David Lucas, que declaró a Efe sentirse muy respaldado en su trabajo por el PSOE. Tras defender a Gómez, negó que el partido coloque "palos de rueda" a nadie, en referencia a la queja de Gómez. Por su parte, la portavoz del PSM en la Asamblea, Maru Menéndez, aseguró que los socialistas no sintieron el apoyo de Blanco en el citado mitin, y que el liderazgo de Gómez está "refrendado por más del 90%" de su organización.

El secretario de Economía del PSM, Antonio Miguel Carmona, subrayó que será el propio partido el que decidirá cuáles son sus candidatos, al tiempo que destacó que Gómez es "el mejor candidato posible".

El PP contempla el vendaval socialista con cierta ironía. Una de sus cabezas más visibles, Esperanza Aguirre, y de manera colateral una de las implicadas en la crisis, hizo una declaración escueta: "Bastantes problemas tiene ya el PSM para que vaya yo a hablar de cuestiones ajenas. Yo hablo de los asuntos del PP de Madrid, que bastante tengo con ello", dijo Aguirre. Gómez argumenta que el ministro de Fomento parece que trabaja más para la presidenta de la Comunidad de Madrid que para el propio PSM.