El supervisor comunica a los consejeros su destitución
Los 20 miembros del Consejo de Administración de Cajasur, que dejó de existir la noche del viernes tras la intervención del Banco de España, han sido citados hoy en la sede de la entidad cordobesa para recibir oficialmente la notificación de su destitución. Al ex presidente de la caja y deán de la catedral de Córdoba, Santiago Gómez Sierra, se la comunicaron en Madrid el pasado sábado. Desde la madrugada del día 22, los miembros del Consejo tienen vetada su entrada en la caja cordobesa.
Los nuevos administradores de la entidad designados por el supervisor -José Antonio Iturriaga Miñón, Tomás González Peña y Francisco Orenes Bo- accedieron ayer a la sede de la caja, según Efe. José Antonio Iturriaga, fue inspector del Banco de España entre 1984 y 1989, cuando saltó al sector privado y fue nombrado director de Auditoría Interna del Banco Zaragozano. González Peña y Franciso Orenes han desempeñado también puestos directivos en el sector bancario. El primero llegó a ser director de banca corporativa para España y Portugal del Santander Central Hispano, mientras que el segundo ejerció cargos de relevancia en el Banco de Murcia y participó en su fusión con el Banco de Valencia en 2002.
Apertura de oficinas
La mayor preocupación que existe en medios financieros y políticos es, sin embargo, qué ocurrirá cuando hoy abran las puertas las 474 oficinas de la intervenida Cajasur. Pese a los mensajes de tranquilidad lanzados desde el Banco de España y desde la Junta de Andalucía de que no peligran los depósitos de los clientes, no es la primera vez que los directores de las sucursales cordobesas de Cajasur abren con temor ante noticias relacionadas con la mala situación de la caja.
A finales de marzo, Cajasur pidió auxilio a Unicaja para lanzar un comunicado público relanzando el proyecto de fusión, ante el temor de los inversores de que la entidad cordobesa no pudiera abonar 1,3 millones de euros de dividendos de una emisión de participaciones preferentes. Dos días antes de que cumpliera el plazo para pagar, se produjo un repunte de retirada de fondos de unos 20 millones de euros, según fuentes de Cajasur. A finales de noviembre, cuando los medios de comunicación informaron de la amenaza de intervención del Banco de España, se produjo también en unos tres días una retirada de 70 millones. En lo que va de año los clientes han sacado 300 millones.
