El Gobierno niega a CiU y PNV una prórroga
El ministro de Fomento, José Blanco, de nuevo en funciones de portavoz del Gobierno, negó el aplazamiento de la reforma laboral que de forma expresa le pidieron ayer CiU y PNV. El Gobierno está decidido a aprobar el decreto el miércoles, el día antes del Consejo Europeo, la última cumbre del semestre de Presidencia española de la Unión Europea. El presidente Rodríguez Zapatero quiere llegar a la reunión con la reforma debajo del brazo.
Josep Antoni Duran Lleida (CiU) pidió ayer en la SER al Ejecutivo "una semana más" para negociar el texto porque, aunque consideró que la reforma es necesaria, ve precipitado que este asunto tenga que resolverse en poco más de dos días con los grupos parlamentarios, cuando a la patronal y sindicatos les ha dado un margen de negociación de años. "El texto es largo y farragoso y tiene que ser simple, contundente y llamativo para los mercados", aseguró. Emilio Olabarría (PNV) se sumó a esta tesis, por entender que en dos días es imposible negociar 41 folios de decreto.
"Que digan qué harían"
Sin embargo, Blanco se apresuró a asegurar en Santiago que "no habrá prórroga". "El Ejecutivo está dispuesto a negociar, pero no a perder el tiempo", zanjó. Blanco criticó a los que "hasta hace dos días decían que había que darse prisa, que se llegaba tarde, y ahora piden una prórroga". "Pues no hay prórroga", sentenció a renglón seguido, informa Pablo López.
Dicho esto, el titular de Fomento replicó a las críticas de PP y CiU a la propuesta de reforma del mercado del trabajo: "Si no les vale, les digo que pongan las cartas encima de la mesa y digan cuál es la reforma que ellos harían".
