El director de la presidenta
Sergio Gamón llegó a la Comunidad de Madrid en 2006, dos años después de que Esperanza Aguirre ganase las elecciones y formase Gobierno. La presidenta madrileña eligió entonces como consejero de Interior a Alfredo Prada, al que hizo además vicepresidente. Aguirre, que es capaz de imponer hasta a la última secretaria de una consejería, impuso a Prada un director general de Seguridad: Sergio Gamón. Prada no tenía ninguna confianza en Gamón, que ya había trabajado como jefe de Seguridad con Aguirre años antes durante su etapa en el Senado y el Ministerio de Cultura. La rivalidad entre Gamón y Prada floreció en poco tiempo. Prada llegó a declarar al fiscal que Sergio Gamón le ninguneaba, le puenteaba y que actuaba por libre. La ex esposa de Gamón asegura que su ex marido respiró cuando Aguirre quitó a Prada de Interior. A partir de ese momento trabajó con las manos libres.
Francisco Granados, su nuevo jefe, llegó a la Consejería de Interior en 2007, pero no cambió a Gamón porque era el director general de la presidenta. Cuando por fin le destituyó en 2008 por el escabroso robo de un ordenador, Aguirre exigió a Granados que le volviese a contratar. Lo hizo, aunque le apartó de funciones, y le siguió pagando más de 90.000 euros.
Archivado En
- Caso espionaje político Madrid
- VIII Legislatura CAM
- Manuel Sergio Gamón Serrano
- Vicepresidencia autonómica
- Esperanza Aguirre
- Yolanda Laviana
- Presidencia autonómica
- PP Madrid
- Gobierno Comunidad Madrid
- Parlamentos autonómicos
- PP
- Gobierno autonómico
- Corrupción política
- Comunidad de Madrid
- Partidos políticos
- Parlamento
- Corrupción
- Comunidades autónomas
- Política autonómica
- Casos judiciales
- Administración autonómica
- Gente
- Delitos
- España
- Política