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Aralar acepta hablar con los radicales

El abogado navarro Patxi Zabaleta, un referente entonces de la izquierda abertzale, denunció públicamente en 1997 el asesinato a manos de ETA del concejal del PP Miguel Ángel Blanco. Esta condena asentó en el año 2000 el nacimiento de la corriente Aralar dentro de Batasuna, como primer paso para su conversión en partido político un año después. A partir de entonces, esta nueva formación se ha convertido en el dardo de las críticas más ácidas desde el bando radical y varios de sus locales han sido atacados.

Sin embargo, ha bastado la decisión pública de Batasuna de iniciar un proceso de acción política "sin injerencias de la violencia" para que Aralar acepte reunirse con quienes le repudiaron hace diez años. Así lo reconoció Patxi Zabaleta ayer en Radio Euskadi, al admitir que su partido ha aceptado la invitación que les cursaron EA y la izquierda abertzale para iniciar "conversaciones oficiales" aunque "sin limitaciones de temas". El acuerdo de abrir las conversaciones fue adoptado en pasado lunes por el comité ejecutivo de Aralar.

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La invitación de EA y la izquierda abertzale se produjo días después de que estas dos formaciones independentistas acordaran una acción política conjunta, durante un acto celebrado el 13 de junio en Bilbao y al que, curiosamente, no invitaron a Aralar.

Zabaleta también aprovechó sus críticas a la modificación de la Ley Electoral para asegurar que "hay que dar entrada a los que defienden el uso exclusivo de los cauces políticos, aunque eso no nos satisfaga ética y moralmente, o exijamos más desde el punto de vista de los principios ideológicos", señaló en referencia a Batasuna.

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