Daños colaterales
En al menos una ocasión, España avisó a los aliados de la coalición internacional en Afganistán de los efectos negativos en términos políticos de los "daños colaterales" de las operaciones militares en el país. Uno de los informes revelados por Wikileaks, fechado el 14 de mayo de 2005, revela que el entonces embajador español ante la OTAN, Pablo Benavides, expresó preocupación por el impacto en la opinión pública y sus consecuencias políticas. "Es un recordatorio -se lee en el texto- de la fragilidad de la opinión pública de las capitales aliadas". En el documento, se habla de "daños colaterales" sin más detalles.
Un ejemplo es quizá el episodio relatado en un informe de febrero de 2008 que se refiere a la muerte de un joven de 24 años por un tiro disparado desde un convoy español en la provincia de Farah, en el oeste del país. Un episodio conocido y documentado en su momento, al igual que la mayoría de las informaciones relacionadas con España en los más de 90.000 folios de los papeles de Afganistán. Como el proyecto español para construir escuelas en la provincia de Badghis.
