_
_
_
_
_

Un catalanista duro de roer

Los postulados de Castells chocan con Montilla y el PSOE

Pese a que Antoni Castells ha desarrollado su principal actividad política en Cataluña, es bien conocido por el PSOE porque fue el principal muñidor del pacto por la nueva financiación de la Generalitat. La dureza de la negociación y sus acusaciones al PSOE de no entender la realidad de Cataluña, con todo tipo de reproches públicos, provocaron un duro enfrentamiento entre las dos familias socialistas.

El rifirrafe llegó a tal punto que un sector importante de los socialistas catalanes empezaron a dudar de la idoneidad de Castells para encabezar las negociaciones. Públicamente siempre le defendieron, sobre todo una vez logró el acuerdo, hace un año, pero internamente cundió la imagen de un Castells excesivamente impulsivo y poco cuidadoso en las relaciones con el PSOE. En plena negociación llegó a pedir al Gobierno que trabajara más y hablara menos.

Más información
El portazo del 'número dos' de Montilla debilita al PSC ante las autonómicas
Antoni Castells quiere promover un cambio en el PSC tras las elecciones

Su confianza en sí mismo durante aquellas discusiones se basaba también en su trayectoria profesional y política. Le avalaba su formación como catedrático de Hacienda Pública experto en economía regional, arcas públicas autonómicas y locales y Estado del bienestar. También su experiencia política, como miembro del Tribunal de Cuentas Europeo y como asesor del gobierno de CiU en la negociación de la financiación con José María Aznar.

Su cercanía con los nacionalistas ha levantado recelos en el PSC, donde algunos sectores le consideran el máximo avalador de la sociovergencia, nombre con el que se bautiza a un posible gran pacto entre PSC y CiU para gobernar en Cataluña. También sus intentos para aumentar el grado de reivindicación nacionalista del PSC han dado pie a estas críticas. En los últimos dos años ha sido evidente su distanciamiento con Montilla por la relación con el PSOE. Ambos vivieron un momento tenso en septiembre del año pasado, cuando Castells se desmarcó en público de la política económica de Zapatero. Montilla le reprendió en la ejecutiva del partido, y llamó a todos los consejeros a evitar cualquier palabra que encendiera los ánimos en el PSOE.

De la tensa relación con el presidente da fe una conversación recogida en el sumario del caso Pretoria, donde el consejero aparece como objeto de las presiones de la trama corrupta. Hablando con uno de los imputados, el ex consejero de CiU Macià Alavedra, Castells se refiere a Montilla: "Cada vez que le meto un resoplido se acojona".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_