Los sindicatos exigen que se aclare la muerte de dos brigadistas
Alrededor de un centenar de personas se concentraron ayer ante el edificio administrativo de la Xunta en Pontevedra, en un acto convocado por los sindicatos de la Administración en solidaridad con las familias de los dos brigadistas fallecidos en el incendio de Fornelos del Montes. CC OO, UGT, CIG y CSIF consideran que, tras las lamentaciones, toca exigir responsabilidades políticas por las condiciones de trabajo de los brigadistas, que tachan de pésimas y de las que responsabilizan al director gerente de la Empresa Pública de Servizos Agrarios Galegos (Seaga), Pablo Arbones, y al secretario general de la consellería, Jorge Atán.
"El Gobierno y la conselleria no pueden desviar toda la atención hacia los incendiarios", señaló Emilio Doforno, coordinador del sector de Administración autonómica de CC OO. "Más allá de las responsabilidades penales y las circunstancias climatológicas cambiantes, hay responsabilidades políticas que hay que sustanciar ahora. No se puede mirar para otro lado cuando la empresa Seaga lleva tres años constituida y sigue con una plantilla con el 99% de temporalidad, sin convenio y sin que se respeten los planes de prevención", protestó.
Fernando García, secretario general de CIG-autonómica, también arremetió contra la política de Medio Rural. "Entre marzo o abril se privatizó la planificación estratégica de incendios y la coordinación de medios operativos, terrestres y aéreos. Ahora nos preguntamos dónde está, porque estos son los resultados. Con la reducción de personal, no se contrató en invierno y no hubo tareas de prevención. Estamos con un problema grave de descoordinación y planificación, y aunque no exista nexo causal sí se abona el terreno para que se den problemas de este tipo", aclaró, en alusión a la muerte de los brigadistas.
Las explicaciones de Medio Rural sobre las causas del siniestro tampoco satisfacen a las centrales. "El informe preliminar ni es exhaustivo ni aborda los problemas de lo que debió de pasar allí", aseguró Doforno. "¿Cómo se puede decir que hubo más preocupación por retirar el vehículo que por los trabajadores que se metieron en la encerrona que les hizo el viento? ¿Cómo se puede argumentar que una brigada llega allí, se disgrega en tres grupos y el capataz se va a buscar la motobomba? ¿Quién quedaba al cargo del grupo? Estas preguntas tienen que responderlas", añadió, y apostilló: "Creemos que se incumplieron bastantes protocolos, empezando por el de actuación". "Las brigadas no se deben disgregar, máxime cuando se llega a altas horas de la noche y con circunstancias
cambiantes".
El portavoz de CC OO comparó el incendio en Fornelos con el de Guadalajara, en 2005, en el que murieron 11 personas. "El PP exigió dimisiones por aquel trágico accidente, y las hubo; exigió responsabilidades y las hubo. Pues aquí debe aplicarse lo mismo", pidió.
También se sumaron a las críticas las diputadas del PSdeG Carmen Gallego y Sonia Verdes, quienes recriminaron la actitud de la Xunta ante la "oleada de incendios" y pidieron a los ciudadanos "no ser cómplices del silencio" del Gobierno gallego. La responsable de Medio Ambiente del PSdeG, Carmen Gallego, se lamentó de la "falta de transparencia de la Xunta, de la falta de medios y de las nulas políticas de prevención" en materia de incendios. Como ejemplo "de la actitud oscurantista y de la manipulación de datos", Gallego apuntó que la TVG, desde el pasado sábado, "tiene orden de no filmar incendios de menos de 80 hectáreas". Verdes aseguró que los recortes en prevención y gestión forestal son "intolerables", ya que se han reducido en 8,7 millones.
El conselleiro de Medio Rural, Samuel Juárez, reiteró, por su parte, un llamamiento a la "tolerancia cero" con los incendiarios y el uso del fuego en el monte, al tiempo que agradeció el "apoyo" de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y el trabajo "callado" del personal de extinción de incendios.
