La batalla de Móstoles
La ejecutiva federal ratificó ayer la decisión del Comité de Ética y Garantías de reconocer el derecho al voto en las primarias de los militantes de Móstoles, agrupación disuelta hace dos años por Tomás Gómez. El equipo del secretario general del PSM asegura que el reglamento de primarias aprobado en junio dice claramente que el censo se cerró el 17 de julio. Y que estatutos del partido (artículos 71 y 72) establecen que la disolución de una agrupación supone la "suspensión de militancia" de todos sus afiliados, que pierden "todos sus derechos". Pero la ejecutiva entiende que es aplicable el artículo 8.3 de la ley de partidos que habla del derecho de los afiliados sancionados a "procedimientos contradictorios" y el 40.3 de la ley de asociaciones sobre la posibilidad de recurrir decisiones. Y que también hay recursos al censo, una vez cerrado por el INE. Según Leire Pajín, es una decisión garantista y ahora se enviarán cartas a los 777 afiliados de Móstoles para que respondan por correo certificado y justifiquen que se ponen al corriente de pago de sus cuotas. La agrupación fue disuelta por Gómez por supuestas afiliaciones irregulares. Su equipo teme que aquella decisión haga que sus votos vayan a Jiménez.
