Por una universidad con mayor diversidad lingüística
Sin atisbo de las protestas que antaño caldearon el ambiente universitario contra el Plan Bolonia, la UPV, la última de las tres universidades vascas en adaptarse al nuevo marco europeo de enseñanza, inauguró ayer el curso 2010-2011 con el protagonismo de los nuevos grados y de los retos sobre el plurilingüismo que debe afrontar el sistema educativo en su conjunto.
El acto, presidido por el lehendakari, Patxi López, contó también con la presencia de la presidenta del Parlamento, Arantza Quiroga; la consejera de Educación, Isabel Celaá; el presidente del Tribunal Superior de Justicia, Juan Luis Ibarra, y los rectores de Mondragon Unibertsitatea, Iosu Zabala, y Deusto, Jaime Oraá.
La inauguración transcurrió sin incidentes, aunque a las puertas del Aula Magna del campus de Leioa cerca de 30 estudiantes se manifestaron bajo el lema Euskal ikasle presoek ikasteko eskubidea ("El derecho a estudiar de los estudiantes vascos presos"), portando cuatro imágenes de reclusos de ETA. Ni los docentes ni las autoridades universitarias se cruzaron con los manifestantes a su entrada en el edificio donde se celebraba el acto.
La lección magistral, a cargo del catedrático de Derecho Constitucional de la UPV Alberto López Basaguren, versó sobre los modelos de diversidad lingüística. El catedrático ensalzó la libertad de elección lingüística de los ciudadanos en sistemas plurilingües y la necesidad de que los poderes públicos la garanticen.
La UPV precisó ayer que en el pasado curso 2009-2010 el 41,3% de sus docentes era bilingüe y el 42% de los libros que editó fueron en euskera. Durante el pasado curso, la universidad pública ofertó 511 asignaturas, menos del 10% del total de materias que imparte, en otros idiomas, como inglés, francés y alemán.
