Recelos de miembros de Cruz Roja
A responsables de una entidad de la solvencia de Cruz Roja no se les pasó por alto las peregrinas condiciones de la construcción de un hospital en Haití que planteó la consejería de Solidaridad y Ciudadanía. Según un informe interno al que ha tenido acceso la Cadena SER, personal de Cruz Roja tenía serias dudas de la pertinencia del proyecto, pero sobre todo de su sostenibilidad. Una vez retirada la financiación de la Generalitat, no había nadie que se hiciera cargo de la gestión y era bastante difícil encontrarlo. Por todo ello, señalan, es "una gran ventaja que no se haya contado con la entidad".
A pesar de lo que sostiene el consejero Rafael Blasco, la polémica fundación Solidaria Entre Pueblos, situada en el epicentro de la polémica del desvío de fondos destinados a cooperación, era la responsable del proyecto. Esta organización no solo recibió los 177.779,19 euros que la Generalitat obtuvo de donativos de los valencianos tras el terremoto que sacudió la isla caribeña. Además de ser la destinataria de la financiación disponible para asumir el proyecto de la construcción, también tendría la responsabilidad de formar el personal.
El documento refleja que representantes de Entre Pueblos junto con el director general de cooperación, Josep Maria Felip, visitaron Haití. Allí cerraron distintos acuerdos. Entre ellos, la firma de una declaración de intenciones con la alcaldesa de la localidad donde se pretendía construir el centro. También se fijó una agenda para firmar un convenio con el ministro de Salud.
Desde Cruz Roja señalaron ayer a este diario que oficialmente la entidad no ha elaborado ningún documento sobre este tema.
