Cultura denuncia la "situación límite" del San Pío V y exige inversiones al Gobierno
La falta de dinero para inversiones culturales es el pan de cada día. Pero siempre es más fácil criticar a otra Administración que reconocer los deberes sin hacer propios. Por eso, una vez presentados unos presupuestos de la Generalitat más restrictivos que nunca, Cultura denunció ayer la "situación límite" en la que se encuentra el Museo de Bellas Artes San Pío V de Valencia -de titularidad estatal y gestión autonómica- debido a la demora de las obras de la quinta fase de ampliación, lo que ha provocado que el centro sufra diversas deficiencias, como estructuras apuntaladas, almacenes obsoletos y falta de espacio. Por ello, el Consell exige al Ministerio de Cultura que "replantee" el proyecto y fije unas fases de ejecución "reales" y con dotación económica.
Así lo expresaron ayer el secretario autonómico de Cultura, Rafa Miró, y la directora general de Patrimonio Cultural, Paz Olmos, que realizaron un recorrido por la zona del museo afectada por la quinta fase para enseñar el estado de la pinacoteca. Esta intervención prevé, entre otras mejoras, ganar unos 10.000 metros cuadrados de superficie -más de 700 de ellos en almacenes-, una nueva entrada por los Jardines de Viveros, una biblioteca y la instalación de una cafetería en el pabellón Benlliure. Asimismo, afecta tanto al museo como a la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos. Entre las zonas que mostraron -a otras, como el torreón, no se pudo acceder por "razones de seguridad"- figura lo que será la entrada a la nueva biblioteca, apuntalada con un andamio.
En los Presupuestos del Gobierno el San Pío contaba con una partida de 140.000 euros, pero el PSOE ya ha presentado una enmienda que eleva la aportación a 1,6 millones y permitiría acometer en 2011 la ampliación.
