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Problemas en la deuda soberana de la UE

Grecia critica la "intransigencia" alemana

Andreu Missé

El primer ministro griego, Yorgos Papandreu, criticó ayer abiertamente la actitud intransigente mantenida, a su juicio, por Alemania al exigir que los bancos asuman también parte de las pérdidas en el supuesto de suspensión de pagos de un país. En su opinión, la exigencia de Berlín "crea una espiral de tipos de interés más altos para aquellos países que parecen estar en dificultades, como Irlanda y Portugal". Para Papandreu es "como si se tratara de una profecía que se autocumpliera que podría forzar a la bancarrota de las economías".

El primer ministro griego hizo estas manifestaciones el mismo día en que su país reconoció un panorama presupuestario peor del conocido hasta ahora y también el mismo día que un grupo de expertos de la UE, el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) aterrizaban en Atenas para examinar sus cuentas.

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Las autoridades griegas revisaron ayer al alza la cifra del déficit público de 2009 para situarlo en el 15,4% del producto interior bruto (PIB), frente al 13,6% anunciado el pasado mes de abril. El Ministerio de Finanzas también aumentó las previsiones de deuda para el mismo año hasta situarla en 298.000 millones de euros, equivalente al 126,8% del PIB, 11,4 puntos más que en la anterior estimación. Para 2010 las estimaciones de déficit y deuda son del 9,4% y 144%, respectivamente.

El incremento de 1,8 puntos del déficit de 2009 se debe a una reclasificación de datos de las corporaciones públicas (0,7%); ajustes en las cuentas de la Seguridad Social y Gobiernos locales (0,9%) y revisión a la baja del crecimiento del PIB (0,2%).

Cifras 'fiables'

El Gobierno se compromete a efectuar este año una reducción sin precedentes del déficit público de 6 puntos lo que supondrá más de 14.000 millones comparado con el registrado el año pasado. El Ejecutivo socialista griego negociará con los expertos internacionales la reducción del gasto en hospitales públicos, la reconducción de las pérdidas de las empresas estatales, el saneamiento de la Administración local. De momento no se prevén más ajustes en salarios y pensiones en el sector público tras los recortes a principios de año.

La consolidación fiscal continuará, de acuerdo con el programa acordado con la UE, el BCE y el FMI, hasta situar el déficit público por debajo del 3% en 2014. Para Bruselas, los nuevos datos, peores que los conocidos, tienen la ventaja de que ahora son cifras "fiables". La UE ha comprometido una ayuda a Grecia de 110.000 millones de la UE, 40.000 corresponden a 2010 y está pendiente de recibir 9.000.

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