_
_
_
_
_
Análisis:Debate sobre el empleo
Análisis
Exposición didáctica de ideas, conjeturas o hipótesis, a partir de unos hechos de actualidad comprobados —no necesariamente del día— que se reflejan en el propio texto. Excluye los juicios de valor y se aproxima más al género de opinión, pero se diferencia de él en que no juzga ni pronostica, sino que sólo formula hipótesis, ofrece explicaciones argumentadas y pone en relación datos dispersos

Estrategia de riesgo

Luis R. Aizpeolea

El presidente José Luis Rodríguez Zapatero no tenía previsto en un debate como el de ayer, dedicado al paro, fajarse especialmente con el líder de la oposición, Mariano Rajoy. Pero este, fiel a su estrategia de dar por acabado el tiempo del líder socialista, rehuyó el debate y se lo puso a tiro. La sesión demostró que jugar a la estrategia del tiempo muerto tiene riesgos si el contrincante sabe aprovechar el vacío.

Así, ante la ausencia de propuestas y la reclamación insistente de Rajoy de que adelantase las elecciones, Zapatero desmontó tres tópicos que maneja sistemáticamente el presidente del PP. El primero, el del absoluto despiste en que la crisis cogió al Gobierno. Este lo tuvo muy fácil al responderle que le pasó a todo el mundo, recordando además cómo el mismo programa con que Rajoy se presentó a las elecciones de 2008 proponía crear 2,2 millones de puestos de trabajo, 200.000 más que el del PSOE.

Más información
Zapatero avisa de que la recuperación es tan débil que puede frenarse

El segundo, el de la próspera herencia de los Gobiernos populares dilapidada por Zapatero, fue aprovechada por este para responder que, si a él se le atribuye el paro, a los Ejecutivos del PP la burbuja inmobiliaria que lo precipitó. "Teníamos una economía hinchada, pero no musculosa. Y se vio con crudeza con la crisis financiera". El ejemplo revelador fue que en 2004 España exportaba más a Andorra que a China.

Al final, entró en la cuestión de fondo, en las acusaciones de falta de confianza en las que Rajoy basa su petición de adelanto electoral. Zapatero no le respondió con que las encuestas otorgan aún menor confianza al líder popular. Le soltó que precisamente una causa de la desconfianza es la escenificación del desacuerdo de ambos sobre la crisis. Pero Rajoy estaba tan fuera del debate que ni se dio por aludido. ¿Podrá sostener esta estrategia un año?

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_