Miles de conductores atrapados en la AP-8 por el vuelco de un camión
Las retenciones en la autopista AP-8 (Bilbao-Behobia) llegaron ayer hasta los 10 kilómetros de longitud tras el accidente sufrido a las 8.15 por un camión cisterna que hizo la tijera cuando circulaba a la altura de Eibar. La carretera permaneció cortada durante cerca de cinco horas, hasta que hacia las dos de la tarde se pudieron abrir los dos carriles en dirección a Bilbao y uno en sentido a Irún. Miles de conductores permanecieron atrapados en esta zona pese a que el tráfico se desvió a la altura del peaje de Durango hacia la N-634.
El causante del atasco, un camión articulado que transportaba gasoil y viajaba en dirección a la frontera, hizo la tijera y se quedó volcado en la calzada, derramando parte de la carga que llevaba sobre la vía. Como consecuencia del siniestro, el conductor del vehículo tuvo que ser trasladado al hospital de Mendaro. Dos de los cuatro compartimentos de la cisterna quedaron afectados, por lo que los bomberos, bajo la supervisión de técnicos del servicio de Aguas del Gobierno, se afanaron en la recogida del conbustible vertido en la carretera.
La lluvia provoca cortes de carretera en Mungia y en Amorebieta
El corte de la autopista provocó colas kilométricas que llegaron hasta los 10 kilómetros hacia las 11.00. El Departamento de Interior informó de que a primera hora de la tarde se pudo proceder a la apertura parcial de la vía mediante un by-pass realizado entre los kilómetros 70 y 71,7 de la AP-8, en los carriles en sentido Bilbao.
Por otro lado, las fuertes lluvias caídas a lo largo de la mañana de ayer causaron problemas circulatorios en las carreteras vascas, especialmente en Vizcaya, como consecuencia de la formación de grandes balsas de agua y la crecida de las regatas. La carretera N-634 estuvo cortada a su paso por Amorebieta en ambos sentidos tras quedar la calzada completamente encharcada. La Ertzaintza y la policía local desviaron la circulación hacia la autopista AP-8.
También permaneció cerrada al tráfico la BI-2120 entre Mungia y Plentzia en prevención de los problemas ocasionados por las fuertes lluvias.
En este sentido, el portavoz de la Diputación de Guipúzcoa, Eneko Goia, informó de que los servicios forales y SOS Deiak permanecieron "vigilantes" ante la situación que presentaban las cuencas del Urumea y del Oria, que superaron el nivel de prealerta por las lluvias registradas en las últimas horas.
El cauce del Oria en Lasarte-Oria superó el nivel de prealerta de 1,5 metros en el punto de control y, en el caso del Urumea, ocurrió otro tanto a la altura del berrio de Ereñozu, en Hernani. Interior activó la alerta naranja debido a las fuertes precipitaciones que pueden afectar especialmente a Guipúzcoa, donde se pueden acumular hasta 80 litros por metro cuadrado.
