La presión familiar y la detección precoz de los problemas, claves para atajar el fracaso escolar
El CTESC envía 72 propuestas al Gobierno para mejorar los resultados
La cruzada del país contra el fracaso escolar que preconizan políticos y docentes se ha plasmado en un recetario con 72 recomendaciones que el Consejo de Trabajo Económico y Social de Cataluña (CTESC) presentó ayer y ha entregado al Departamento de Enseñanza de la Generalitat. Destacan algunas medidas clave para combatir el fracaso, como la presión de las familias a los centros, la detección precoz de las dificultades, la evaluación continua del nivel del alumno y la formación del profesorado.
"El riesgo de fracaso", asegura el informe, "se reduce si algunos padres y madres instan al centro para que el alumnado obtenga mejores resultados, lo que indica la necesidad de colaboración de los padres y las madres con los centros escolares".
El rendimiento de los alumnos "depende del contexto escolar, pero también del familiar y del nivel socieconómico", recalca el informe, que ayer presentó el presidente del CTESC, Josep Maria Rañé. Este organismo es un órgano consultivo y de asesoramiento del Ejecutivo catalán.
Los autores del informe han entrevistado a expertos en educación y han buceado en las causas del fracaso. En Cataluña casi el 30% de los alumnos no acaban la secundaria a los 16 años y más del 31% no completan estudios hasta los 24 años más allá de la secundaria obligatoria, lo que se llama abandono temprano de los estudios.
Los expertos reunidos por el CTESC aseguran que el riesgo de fracaso de los alumnos tiende a aparecer incluso "alrededor de las primeras etapas escolares, particularmente durante la educación infantil" (hasta los seis años). "El problema es que a veces se detecta pero no se ponen los medios", asegura el CTESC.
El Departamento de Enseñanza, que dirige Irene Rigau, quiere que las escuelas hagan hincapié en mejorar la lectoescritura (enseñanza y aprendizaje de la lectura simultáneamente con la escritura). Para mejorar el fracaso escolar, "es muy importante una detección precoz de los factores que inciden en el aprendizaje", dijo Rigau en la clausura del acto en el que se presentó el informe contra el fracaso escolar.
El catedrático Jorge Calero, uno de los autores del estudio, subrayó la importancia de la formación del profesorado y recalcó que el bagaje social y cultural de las familias influye en los resultados escolares. Calero añadió que los inmigrantes se adaptan bien a la escuela catalana pasada la primera generación.
