_
_
_
_
_

"Lo primero es coger las carreteras y luego ya nos entenderemos"

Las escuchas revelan las prácticas mafiosas de la trama para controlar el sector en Girona - "Las grandes constructoras nos respetan. Todo el mundo nos respeta"

Jesús García Bueno

"Está todo arreglado", "tenemos a todas las empresas controladas", "que no nos toquen los cojones", "los de Barcelona nos respetan", "nos repartiremos el pastel", "pienso reclamar mi parte", "lo primero es coger las obras y luego ya nos entenderemos". Estas son algunas de las expresiones que repiten los implicados en sus conversaciones telefónicas, incluidas en el sumario del caso. El lenguaje revela el compadreo entre los empresarios de las asfalteras de Girona, que presumen de influencia política y se muestran seguros de conseguir adjudicarse tal o cual obra.

Xavier Esglea, apoderado de la empresa Rubau y uno de los más activos al teléfono, asegura que las obras de carreteras "están todas repartidas entre los asfalteros... de todo el mundo mundial". Y deja bien claro a su interlocutor que le corresponde un tramo de la autopista AP-7 entre La Jonquera y Girona: "En teoría, a mí me toca lo de arriba del todo". Esglea, al que la Guardia Civil considera uno de los coordinadores de la trama, se muestra satisfecho por haber convertido Girona en el feudo de un grupo de empresas. "Las constructoras grandes nos respetan y no nos la lían. Y los de Barcelona, igual. Todo el mundo nos las está respetando, no hay ningún problema". Esglea comenta con otro empresario que él "respeta los Ayuntamientos" si su interlocutor "no toca los cojones" y no "se mete" en las autopistas.

Más información
Antifraude critica a la Diputación de Girona por favorecer al clan de los 'asfalteros'

Tras las elecciones que dieron la Generalitat a CiU, los empresarios comentaron la necesidad de mantener contactos con cargos del partido. Y debatieron la conveniencia de reunirse con dos exconsejeros de Política Territorial en los Gobiernos de Jordi Pujol: Felip Puig (actual consejero de Interior) y Pere Macias, ahora diputado en el Congreso. Los implicados presumen de una "buena relación" con Macias, al que califican, en contraste con Puig, como un hombre "más suave, más dulce, no es tan agresivo".

Robert Lluís Juvinyà, de Aglomerats Girona -responsable, según los investigadores, de los contactos políticos- sugiere tener influencia en el Ayuntamiento de Blanes, que "se mirará un tema con cariño". Lo mismo en Maçanet. Según Juvinyà, una responsable municipal le dio un CD con información sobre una obra de 800.000 euros. "Me ha dicho 'ostia, a ver si os ajustáis y os echo una mano". El gerente de Carreteras de GISA en Girona, Jordi Vergé, era más discreto: "Ahora por teléfono no te lo cuento. Hacemos una reunión, pero que no sea multitudinaria, porque todo se sabe".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Jesús García Bueno
Periodista especializado en información judicial. Ha desarrollado su carrera en la redacción de Barcelona, donde ha cubierto escándalos de corrupción y el procés. Licenciado por la UAB, ha sido profesor universitario. Ha colaborado en el programa 'Salvados' y como investigador en el documental '800 metros' de Netflix, sobre los atentados del 17-A.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_