Ofrenda de flores para las víctimas
Las instituciones vascas también estuvieron presentes ayer en el recuerdo de las víctimas del bombardeo. Pasadas las cuatro media de la tarde -casi la misma hora a la que empezaron a caer las bombas sobre la villa de Gernika el 26 de abril de 1937- la consejera de Justicia y Administración Pública, Idoia Mendia, encabezó una ofrenda floral en el cementerio de Zallo en homenaje a las víctimas. Al acto institucional también contó con la presencia de la presidenta de las Juntas Generales de Vizcaya, Ana Madariaga, la diputada de Cultura, Josune Ariztondo, y el alcalde de Gernika, José María Gorroño. Poco antes se había escuchado en todo el pueblo un toque de sirena, uno de los actos organizados por el grupo Gernika Batzordea para conmemorar el aniversario del bombardeo de la guerra civil, que culminaron con una manifestación silenciosa a la luz de las velas por las calles de la localidad cuando cayó la noche.
El aniversario tuvo su faceta cultural en la proyección del audiovisual Gernika, del artista Jon Iturrarte, autor de la escultura Marimeta, ubicada en la localidad, en pases sucesivos en el Elai-Alai. El momento de la participación ciudadana en el recuerdo del bombardeo llegó con la representación de la obra colectiva Gernika sutan. Los ciudadanos de Gernika fueron protagonistas de un montaje teatral producido por Maskarada y dirigido por Carlos Panera, sobre textos de Edorta Jiménez, con la colaboración de los bertsolaris Jon Lopategi y Onintza Enbeita y referencias a autores como Paul Eluard, Cesar Vallejo, o León Felipe. La obra reconstruyó diferentes escenas vividas el día del bombardeo sobre la villa en lugares emblemáticos del casco urbano y rememoró el terrible incendió que se desató en sus calles. Panera ha tratado de crear "un molde escénico en el que el pueblo de Gernika pueda participar y conservar la memoria histórica de manera viva, metiéndose en la piel de aquella generación, a través de la emoción del gesto y de la música".
