Compromís, contra el 5% y los problemas para situar su marca
El reto de la Coalició Compromís, que lidera el secretario general del Bloc Nacionalista, Enric Morera, y en la que se integran además de Josep Maria Pañella, también del Bloc, las diputadas Mònica Oltra y Mireia Mollà, de Iniciativa del Poble Valencià, es superar la fatídica barrera del 5% de los votos para obtener representación parlamentaria. Un objetivo complicado en el que esta conjunción de partidos valencianistas de izquierda y ecologistas ha de luchar contra los problemas de ubicación y de identificación de su marca.
Compromís es el nombre con el que han desempeñado su notable actividad parlamentaria Morera, Pañella, Oltra y Mollà durante la última legislatura en las Cortes Valencianas. Una etiqueta que, en sus orígenes incluía a Esquerra Unida del País Valenciá, con la que rompieron en un estruendoso episodio al inicio del mandato que las dos partes han tratado, muy educadamente, de rememorar y de achacarse entre ellos. Pero el electorado, como señalan diversos analistas y expertos demoscópicos, no tiene una imagen clara de quiénes son y qué representa ahora el nombre de Compromís, confusión a la que contribuye el hecho de que en algunos municipios tan importantes como Castellón, el Bloc se presente en solitario a las elecciones locales.
La significativa implantación de Compromís en el territorio valenciano, sobre todo en capitales comarcales del área valencianohablante (concurren en más de 300 localidades) tiene su reverso en la escasa implantación y presencia social en ciudades como Valencia o Alicante. "La Coalició Compromís puede ser la gran sorpresa de estas elecciones en Valencia", dijo ayer el candidato a la alcaldía, Joan Ribó, un conocido líder de la izquierda valenciana (fue coordinador de Esquerra Unida y diputado de L'Entesa en la legislatura anterior a la que ahora concluye) en cuya capacidad para arrastrar el voto progresista urbano ha depositado la coalición una buena parte de sus esperanzas.
Si Ribó, que lleva ya muchas semanas pateando los barrios, hablando con asociaciones y buscando el contacto con los vecinos, logra enganchar a una parte significativa del voto más concienciado, puede que Compromís vuelva a estar en las Cortes. "Son muy buenas las sensaciones que hemos recogido de los ciudadanos y ciudadanas durante los meses de precampaña", decía ayer Ribó, que calificaba de "sólido, sensato y con propuestas elaboradas" el programa que defiende.
