"El futuro no lo veo aquí, lo veo en otro país"
Andreu Sierra apostó por aprender un oficio: se formó y trabajó en el sector de las artes gráficas hasta que, hace dos años, se marchó una temporada a trabajar a Argentina. La vuelta ha sido una bofetada que dura ya dos años: temporadas de paro y contratos temporales. Con 27 años y sin haberse podido emancipar, comienza a agobiarse -"no encuentro trabajo ni a patadas, solo medias jornadas por 450 euros al mes"- y planea volver a marcharse. Su hermana ya lo ha hecho. "Busco otros perfiles, estoy abierto a todo... pero el futuro no lo veo aquí, lo veo en otro país", dice tras explicar que no es el único parado de su entorno. "En Latinoamérica conozco gente, no hay problema de idioma. Si falla, otra opción es el Reino Unido, como mi hermana, que se ha ido allí y trabaja de administrativa, aunque tampoco es fácil".