Los populares repiten el mismo equipo ganador
La campaña del candidato popular, Mariano Rajoy, está en manos del mismo equipo electoral que ya llevó al Partido Popular a arrasar en las elecciones autonómicas y municipales del pasado 22 de mayo, cuando prácticamente todo el territorio español se tiñó de azul.
Está conformado por varios cuadros populares -como los vicecoordinadores de campaña, Juan Carlos Vera, José Antonio Bermúdez de Castro o Juan Manuel Moreno-, muy vinculados al aparato popular, pero que hasta ahora han tenido muy escasa exposición a los medios de comunicación. O Baudilio Tomé, el hombre de confianza al que Rajoy ha encargado elaborar el programa electoral con el que se presenta.
A la cabeza de todos ellos está Ana Mato, vicesecretaria de Organización, que por primera vez estará al frente de una convocatoria de elecciones generales, en sustitución del senador Pío García Escudero, aunque cuenta con una dilatada experiencia en el trabajo en campaña.
Hasta la fecha, Mato ha organizado seis campañas de su partido, con bastante éxito, especialmente la última. Todas, con la premisa de que hay que comenzar a prepararlas el día después de haber perdido la convocatoria anterior, como le gusta decir de su trabajo.
En el PP, la oficina electoral se ha dividido en dos grupos de trabajo. Uno de ellos está dedicado exclusivamente al candidato Rajoy y tiene como máximo exponente al jefe de gabinete, Jorge Moragas, y que por tanto es el responsable de la agenda del cabeza de cartel.
En esta pata de la oficina también está incluida la vertiente de la estrategia de comunicación, con Carmen Martínez Castro, jefa de prensa de Rajoy, y Marilar de Andrés, que durante muchos años ha trabajado con el exministro y candidato a la presidencia andaluza, Javier Arenas.
El otro equipo es el que trabaja día a día junto a Mato en el diseño de la campaña en su conjunto, lo que supone preparar los actos electorales por todo el país, los mítines, los lemas y la publicidad y se ocupa sobre todo de movilizar el aparato popular en toda España.
En esta ocasión, la jefa de campaña Ana Mato sabe que le toca una mayor responsabilidad porque su partido está a un paso de volver a tocar poder. Y nada puede fallar.
Rajoy nunca ha logrado el aprobado
El candidato socialista a la presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, siempre ha sido uno de los mejor valorados en las encuestas del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). Su peor nota desde abril de 2006, fecha en la que entró a formar parte del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, fue la obtenida hace ahora un año, en julio de 2010, cuando solo alcanzó un 4,47. El candidato del PP, Mariano Rajoy, nunca ha conseguido una valoración que supere la peor de Rubalcaba en los últimos siete años. De hecho, nunca ha logrado un aprobado. Su nota más alta fue el 4,55 que logró en enero de 2005, aunque meses antes, tras las primeras elecciones que ganó Zapatero, Rajoy rozó el 5 y consiguió hasta un 4,83 en abril. La nota más alta alcanzada por Rubalcaba, un 5,38, fue en abril de 2008, como responsable de Interior y poco después de que ETA matara al exconcejal socialista Isaías Carrasco. La más alta de Rajoy, al margen del 4,83 logrado tras las generales de 2004, fue el 4,55 conseguido en 2005, cuando el candidato a la presidencia comenzó a dar muestras de alejamiento de las tesis de Aznar.
Ninguno de los dos ha llegado al 6,61 logrado por el aún presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en abril de 2004.
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