Bélgica pacta aligerar las medidas para sosegar la crisis
Desde hace más de un año, Bélgica no tiene un Gobierno oficial sino uno en funciones porque los distintos líderes francófonos y flamencos no han conseguido ponerse de acuerdo sobre cómo formar Gobierno. Sin embargo, la crisis logró sentar ayer por la tarde a los diferentes líderes políticos de un lado y de otro para acelerar los planes que frenen la crisis.
Según el ministro belga de Finanzas, Didier Reynders, es urgente que Bélgica "actúe claramente" y ponga en marcha las medidas pactadas el pasado 21 de julio por la Unión Europea, como única vía para apaciguar las embestidas que está sufriendo la economía nacional belga y poder refinanciar su deuda pública, ya que es uno de los países más endeudados de toda la UE (representa el 97% del PIB).
Además, Bélgica también ha tenido que enfrentarse a la tan temida prima de riesgo que ha empeorado en los últimos días, al igual que en otros países de la eurozona como es el caso de España o Italia. En los últimos días, el Gobierno en funciones ha tenido que afrontar un diferencial con Alemania en más de 200 puntos básicos, el máximo histórico del país.
