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El caso de Ronda agita la revuelta interna en el PSOE de Málaga

Los críticos exigen la dimisión del secretario general por el fichaje de Marín Lara

La actuación judicial contra el exalcalde de Ronda Antonio Marín Lara, el secretario de la agrupación local del PSOE, Francisco Cañestro, y otros dos concejales más por presunta corrupción ha tenido un efecto detonante para reavivar la crisis interna en el PSOE de Málaga, con una ejecutiva cada vez más cuestionada. Unos 70 militantes de Ronda habían firmado ya en la tarde de ayer un escrito en el que exigen la "dimisión inmediata" del secretario general del partido en la provincia, Miguel Ángel Heredia, y del secretario de Organización, Francisco Conejo, como responsables últimos de la decisión de incorporar a Marín Lara al partido desde el PA, situarle al frente de la candidatura municipal pese a que había sido declarado tránsfuga, la consiguiente pérdida de la alcaldía, y, sobre todo, no haber atendido los numerosos avisos sobre la existencia de graves irregularidades en la gestión.

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El movimiento no se limita a la Serranía de Ronda. El escrito circuló ayer por varias agrupaciones de la capital de la provincia en las que los sectores críticos con la dirección provincial parecen decididos a dar un paso adelante en la revuelta y piden a la ejecutiva regional que disuelva la dirección de Málaga y nombre a una gestora que organice un congreso.

Seis días después de la detención de los cuatro concejales socialistas y de que la dirección regional anunciara que les daba de baja cautelarmente como militantes, los críticos de Ronda han decidido rebelarse contra la dirección provincial cansados de seguir sin una dirección en la agrupación local, pues aun no se ha nombrado una gestora, y lamentan que el partido "carezca de voz y presencia ante acontecimientos que siembran la confusión y causan indignación de los ciudadanos".

En la carta, dirigida también al secretario general del PSOE andaluz, José Antonio Griñán, se recoge el malestar acumulado en los últimos años por las decisiones erráticas de la dirección provincial y se pide que se tenga en consideración que ésta ha sido "parte del problema y por ello es incapaz de dar una solución".

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Los firmantes del escrito, entre los que se encuentran algunos pesos pesados como el exalcalde y expresidente de la Diputación Juan Fraile, la diputada en el Congreso Ana Fuentes, y ex cargos públicos como los exconcejales Josefa Becerra, Antonio Aranda o Encarnación Narváez, entienden que la dimisión es la decisión más coherente que les cabe tomar a Heredia y Conejo en consecuencia con sus decisiones.

"Consideramos que la dirección provincial, por acción u omisión, tiene una amplia responsabilidad en lo ocurrido, al no haber actuado con contundencia y haberse negado a escuchar a los compañeros que con la mejor voluntad han tratado de dar una visión distinta a la idílica que otros dibujan de forma interesada. Por ello, es esta dirección política la que ha de ser consecuente con sus errores y dar ejemplo en sus respuestas", argumentan los críticos en su escrito para justificar la petición de dimisión de los secretario general y de Organización provincial "incapaces ambos de escuchar y articular decisiones que nos hubieran evitado los tristes momentos por los que estamos atravesando".

Los críticos piden también la "pronta designación" de una gestora, y requieren que se incluya en ella una "representación plural acorde con la diversidad que existe en la agrupación de Ronda", para que se devuelva cuanto antes la normalidad en la vida orgánica del partido y tenga voz.

Ahora mismo el PSOE de Ronda no tiene órgano de dirección una vez dado de baja su secretario general. El grupo municipal tiene que ser ampliamente renovado porque se han ido cuatro de los siete concejales, entre ellos los que fueron los tres primeros de la lista.

En Málaga, el sector crítico ha elaborado también un escrito de adhesión a los socialistas rondeños en el que igualmente exigen la dimisión de Heredia y Conejo dada "la responsabilidad orgánica derivada de la afiliación, la gestión y la posterior promoción política" de los imputados en el caso Acinipo.

La crisis interna en el siempre convulso PSOE de Málaga estaba larvada desde los fatales resultados electorales de las municipales de mayo. La elaboración de la candidatura para las generales del próximo 20 de noviembre ya evidenció la fractura, y el asunto de Ronda parece marcar ahora un toque a rebato. Pedir un congreso es pasar a la acción.

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