Un viaje por el siglo de las vanguardias

Carlos Granés Maya fue el nombre en boca de todos ayer en Guadalajara. El antropólogo colombiano (Bogotá, 1975) obtuvo el Premio Internacional de Ensayo Isabel Polanco por su obra El puño invisible. Arte, revolución y un siglo de cambios culturales. El jurado, presidido por Fernando Savater, otorgó el galardón por unanimidad en Guadalajara (México), y destacó en su fallo que el ensayo de Granés "hace un recuento narrativo de las vanguardias occidentales del siglo XX, desde el futurismo hasta la posmodernidad, con agilidad cinematográfica, profundidad y creatividad".

Savater explicó en la conferencia de prensa en la que se anunció el premio que el jurado estaba "dispuesto a mantener feroces discusiones", pero que no hizo falta. "Todos estuvimos enseguida de acuerdo en la importancia del ensayo de Carlos Granés y todos habíamos disfrutado con su lectura. La obra ha sido, en este sentido, un premio para el jurado, y es un auténtico regalo para los lectores", argumentó el autor de Ética para Amador. El historiador y ensayista cubano Rafael Rojas, ganador del premio en 2009 con Las repúblicas del aire y miembro del jurado en esta ocasión, destacó también "la amenidad de su escritura, la riqueza con que describe y explica los episodios y las ciudades que conformaron la historia de las vanguardias".

El puño invisible recorre en sus páginas desde la irrupción del futurismo de Marinetti hasta la revuelta de los indignados de Madrid que la pasada primavera se enfrentaron a la "racha de optimismo que siguió a la muerte de Franco", pasando por la experiencia educativa de Summerhill, el situacionismo o los Sex Pistols. El libro defiende la tesis de que mientras las grandes revoluciones políticas del siglo XX fracasaron, la revolución cultural que las acompañó triunfó. Dicho de otra manera: que el dadaísmo venció a Lenin. Carlos Granés Maya comentó ayer en una conversación telefónica con Guadalajara desde Madrid que el origen de su trabajo estaba en su interés por explicar "el impulso revolucionario", el "por qué un individuo decide desafiar las convenciones y trata de crear una sociedad nueva". En el ámbito de las revoluciones culturales expresó su admiración por artistas como George Grosz, la generación beat, John Cage o Lucien Freud, entre otros. A otros protagonistas más recientes de las vanguardias, caso de la artista británica Tracey Emin, los sitúa en el disparadero, al denunciar en ellos cierta tendencia a la rebeldía profesional.

El autor de El puño invisible estudió Psicología en la Universidad Javeriana de Bogotá y posteriormente se doctoró en Antropología Social por la Complutense de Madrid. Granés Maya es colaborador habitual desde 2006 de la revista Letras Libres.

El premio está dotado con 100.000 dólares (73.152 euros) y una escultura de Martín Chirino. En esta convocatoria se recibieron 146 manuscritos inéditos procedentes de Argentina, Bolivia, Colombia, Chile, Ecuador, España, EE UU, Puerto Rico y Venezuela. La ceremonia de entrega se celebrará en noviembre en la Feria del Libro de Guadalajara y la obra será publicada por Taurus.Además de Fernando Savater y Rafael Rojas, el jurado estuvo integrado por el escritor y profesor mexicano Gonzalo Celorio, el narrador y periodista colombiano Héctor Abad Faciolince, el escritor venezolano José Balza y la investigadora colombiana Margarita Valencia. La concesión del galardón estuvo presidida por el rector de la Universidad mexicana de Guadalajara, Marco Antonio Cortés, quien destacó que el premio "mantiene viva la memoria de Isabel Polanco y su voluntad de promover el diálogo de ideas". El año pasado el vencedor fue Humberto López Morales con el ensayo La andadura del español por el mundo.