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Rajoy intenta ganarse el favor de Merkel con promesas de austeridad

Carlos E. Cué

Mariano Rajoy buscó ayer en Berlín la complicidad de la canciller Angela Merkel hacia las reformas del Gobierno reafirmando su compromiso con la austeridad. Rajoy no se atrevió a reclamar a Merkel una mayor flexibilidad en los objetivos de déficit, que implican para España un recorte de 40.000 millones en plena recesión, algo que el Gobierno asume como casi imposible. En este asunto, Merkel se mostró inflexible. El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, dejó claro que el Ejecutivo trabaja en que Bruselas acepte que el objetivo del 4,4% de déficit debe ser revisado.

Editorial en la página 26

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