Berlusconi vincula la solución de Alitalia a una "dolorosa reducción" de personal
El primer ministro electo culpa a los sindicatos del abandonodo de Air France-KLM
El próximo presidente del Gobierno de Italia, Silvio Berlusconi, ha reiterado hoy su convicción de que un grupo nacional comprará Alitalia, pero añadió que será inevitable una "dolorosa reducción" del personal de la aerolínea, en declaraciones a una emisora de radio.
"Para nosotros habría sido mejor dejar al anterior Gobierno la patata caliente de cerrar las negociaciones de compra con Air France-KLM, pero es interés nacional no perder la compañía de bandera", ha destacado Berlusconi antes de responsabilizar a los sindicatos de haber provocado con sus reticencias la retirada de la oferta de Air France-KLM,.
El futuro jefe de Gobierno ha añadido que habrá que salvaguardar el mayor número de empleados de Alitalia, pero que es inevitable que muchos trabajadores de la aerolínea "se tendrán que buscar otro puesto de trabajo porque nadie puede garantizar el actual número de empleados".
El Gobierno de Italia en funciones aprobó ayer un préstamo puente de 300 millones de euros, que tendrá que ser reembolsado el próximo 31 de diciembre, para garantizar la supervivencia de la compañía de bandera Alitalia.
El ministro de Economía en funciones, Tommaso Padoa-Schioppa, ha puntualizado que ha sido el nuevo presidente del Gobierno, Silvio Berlusconi, quien ha insistido en que la cifra prevista para el préstamo -unos 150 millones de euros- aumentase hasta los 300 millones.
Según Berlusconi, ahora los empresarios italianos tendrán algunos meses para analizar las cuentas de la compañía y después presentar su oferta vinculante.
Por otra parte, Berlusconi rechazó las acusaciones de que el grupo franco-holandés Air France retirase su oferta por Alitalia debido a las "injerencias políticas". "No es verdad que se han producido injerencias políticas, lo único cierto ha sido el veto de los sindicatos a las condiciones impuestas por Air France", ha explicado.
El presidente del Gobierno saliente, Romano Prodi, afirmó ayer que han sido "las excesivas interferencias registradas durante la campaña electoral por parte de facciones políticas bien identifiadas y las dificultades planteadas por los sindicatos", lo que ha hecho que Air France-KLM retirase su oferta.
La propuesta de Air France-KLM preveía un desembolso total de 2.700 millones de euros y un recorte de 1.600 empleados, lo que no aceptaron los sindicatos, que pedían menores despidos.
Carta abierta de los trabajadores
En esta línea y a pesar de la concesión del crédito, la preocupación de los trabajadores sigue siendo elevada. Un grupo de 2.300 empleados, entre pilotos, asistentes de vuelo y técnicos de manutención, entre otros, han enviado hoy una carta abierta a los sindicatos, al presidente de Air France-KLM, Jean Cyril Spinetta, al Gobierno y a todos los italianos, en la que calificaban de "irresponsable" el comportamiento de los sindicatos por haber provocado la ruptura de las negociaciones con Air France-KLM.
Según este colectivo, la oferta de los franceses era "la única solución industrialmente y financieramente sólida y creíble", al tiempo que manifestó sus dudas sobre la utilidad del préstamo puente, cuyos 300 millones de euros "serán quemados en pocos meses".
En cuanto a las compañías que estarían dispuestas a negociar con Alitalia figuran la alemana Lufthansa, la rusa Aeroflot -que está esperando una propuesta de los italianos-, y la local Air One, que en el pasado había presentado una oferta junto a Intesa Sanpaolo. Tampoco se descarta la formación del consorcio empresarial italiano anunciado por Berlusconi durante la campaña electoral.
El consejo de administración de Alitalia se reunirá mañana para evaluar la situación. También está previsto un encuentro con los sindicatos en el que ambas partes están llamadas a poner todas las cartas sobre la mesa.
