El Supremo de EE UU paraliza la venta de Chrysler a Fiat
Accionistas del fabricante estadounidense recurrieron una operación que la Casa Blanca considera necesaria para evitar su liquidación
El Tribunal Supremo de Justicia de EE UU ha decidido dejar en suspenso la venta de los activos del fabricante de automóviles estadounidense Chrysler al italiano Fiat, con objeto de contar con más tiempo para estudiar los términos de la operación.
La transacción, aprobada la semana pasada por el Tribunal de Bancarrotas del Distrito Sur de Nueva York, es un paso crucial para la reorganización de Chrysler, pero varios accionistas decidieron recurrir la operación ante el Supremo porque la consideran inconstitucional.
Los rebeldes son un grupo integrado por tres fondos de pensiones en Indiana, que poseen cerca de 42 millones de dólares de los 6.900 millones en préstamos garantizados. La petición se hizo a primera hora del domingo, después de que la corte de apelaciones en Nueva York no mostrara ninguna objeción a que se siga adelante con una operación que la Casa Blanca ve necesaria para evitar la liquidación de Chrysler, informa Sandro Pozzi.
El pasado lunes, la nueva Chrysler empezaba a emerger tras apenas un mes en suspensión de pagos, el mismo día en el que General Motors tomaba esa misma senda para sobrevivir. El juez que supervisó su reorganización autorizó que los activos sanos del grupo se vendieran a una nueva entidad.
Aunque los italianos tendrían una participación minoritaria (del 20%) en un primer momento, quedarían al frente de la gestión del nuevo grupo. Pero los inversores de Indiana pusieron el grito en el cielo, porque consideraron que con este arreglo los intereses de los acreedores no asegurados se pusieron por delante de los seniors. Alegan que la venta perjudica a los accionistas titulares de bonos asegurados (respaldados con activos de la empresa), en favor de los que tienen acciones no aseguradas.
Cuatro de los magistrados del alto tribunal tendrán que celebrar ahora una votación a puerta cerrada para decidir si aceptan el recurso de apelación de los tres fondos de pensiones que solicitan bloquear la operación.
