El acuerdo laboral condiciona la fusión de Caja Duero y Caja España
La presidencia y la sede social se ubicará en León y la dirección general, en Salamanca.- Se convierte en la octava entidad con unos activos de casi 50.000 millones
No hubo sorpresas o quizá sí. Los consejos de administración de Caja España y Caja Duero han aprobado este martes iniciar los trámites de fusión de ambas entidades. La diferencia es que mientras en la entidad leonesa ha habido unanimidad, en Caja Duero, no. Tres de los 16 consejeros presentes han votado en contra. Dos han sido los representantes de UGT y otro elegido por los impositores, Antonio Muñoz, responsable de UGT en la entidad, considera que el consejo no ofreció suficientes garantías "por escrito" sobre la necesidad de alcanzar un acuerdo sobre la reducción de plantilla. No obstante, Julio Fermoso, presidente de Caja Duero, ha dicho a los periodistas que sin acuerdo sindical no habría fusión. En principio, podrían sobrar unas 300 personas de Duero, 550 de España, así como 253 oficinas. Se pedirán unos 680 millones al fondo de rescate.
La denominación social de la futura entidad será Caja España de Inversiones, Salamanca y Soria. La sede social, la presidencia y los órganos de gobierno se ubicarán en León, mientras que la dirección general se ubicará en Salamanca. La presión del Banco de España ha resultado determinante para que ambas cajas crearan la octava entidad -o séptima, dependiendo de los procesos de fusión abiertos- por las necesidades de capital de ambas. Si todos los trámites siguen el calendario planificado, las dos entidades estarán fusionadas en julio próximo aunque seguirán con sus marcas dos años más.
La resultante de la fusión alcanzará unos activos totales de 45.257,9 millones de euros, sólo superados por La Caixa (270.620,1 millones), Caja Madrid (189.606,1), Bancaja (108.875,3), la unión de Caixa Catalunya-Manresa-Tarragona (81.953,7), Caja Mediterráneo (73.553) y Unicaja-Caja Jaén-Cajasur (54.111). El proyecto de "fusión fría" en el que trabajan Caja Navarra, Caja Canarias, Sa Nostra y Caja de Burgos, denominado Banca Cívica, sería la sexta entidad por activos del país (59.592,5).
La nueva caja contará además con unos 6.000 empleados y 1.117 oficinas. Se estima que tras la fusión pueden sobrar unos 900 trabajadores. La Confederación de Sindicatos Independientes de Cajas de Ahorros (Csica) ha exigido a Caja España y Caja Duero "voluntad" para "avanzar decididamente" en la negociación del pacto laboral de la nueva entidad "dejando a un lado las posiciones que ambas entidades mostraron" en la pasada reunión del 28 de diciembre. El presidente de Csica, Félix Torquemada, ha valorado el acuerdo alcanzado este lunes y señaló que las plantillas de trabajadores "no deben soportar el sacrificio de la fusión". La entidad, que reformará la estructura del sistema financiero autonómico, contará con unas cifras de inversión crediticia próximas a los 30.000 millones de euros (29.393,5 millones agregando los datos de cada una de ellas del primer semestre de este año).
El volumen de depósitos de clientes se situaría cerca de los 31.800 millones de euros. La entidad fusionada tendría recursos propios básicos mínimos del 9% a partir de 2010, muy por encima de las necesidades adicionales contempladas en los cambios normativos que se barajan, y podrá afrontar, según las previsiones, la amortización de las participaciones adquiridas por el FROB (Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria) con su propia capacidad de generación de recursos sin mermar su posición competitiva.
Fermoso ha añadido que el acuerdo alcanzado con Caja España es un "buen pacto con visión de futuro para crear una nueva caja con gran solvencia y que estará a la cabeza en el ranking de España en la séptima posición". Ha destacado que el volumen de negocio y la gestión comercial, que acogerá la ciudad Salamanca, será el "doble" que la actual y "parecida" a las de las cinco firmas financieras más importantes del país.
El presidente ha indicado que la aprobación definitiva del proyecto de fusión entre ambas entidades debe ser todavía sometido a los consejos y a las asambleas generales de las dos cajas, reuniones que están previstas, inicialmente, para los meses de febrero y marzo próximos. En todo caso, ha precisado que el Consejo de Administración ha valorado el acuerdo, porque se crearía "una entidad más solvente, fuerte, eficiente, viable y mejor posicionada para afrontar los nuevos retos de los mercados financieros, así como la incorporación de nuevas entidades", una posibilidad que no se descartó aunque opinó que aún es pronto para tratar.
En el preacuerdo "se respetan los objetivos principales que el propio Consejo de Administración había marcado para la negociación", ha dicho, para añadir que, aunque en toda fusión empresarial hay siempre una "sensación agridulce", en esta ocasión "se han alcanzado los objetivos". Por este motivo, ha destacado que la entidad resultante tiene "un futuro muy potente y prometedor"·.
