Las Bolsas europeas aumentan sus caídas con la apertura en rojo de Wall Street

El pesimismo sobre la recuperación económica y el temor a una recaída en la crisis ha provocado hoy fuertes pérdidas en las principales Bolsas con el español Ibex 35 al frente de los descensos. El selectivo ha cerrado la sesión con una caída del 3,21%, la mayor desde el 29 de junio, y mañana abrirá en 10.374 puntos.

Al aviso que lanzó ayer la Reserva Federal de EE UU de que la recuperación de la primera potencia mundial está siendo "más modesta de lo anticipado" se ha sumado hoy el Banco de Inglaterra. El instituto emisor británico ha secundado a su homólogo estadounidense y ha rebajado sus previsiones de crecimiento para el próximo ejercicio. En paralelo, la salida de los inversores de aquellos valores más volátiles por el temor a perder los beneficios obtenidos en los avances de los últimos días ha llevado la rentabilidad del bono alemán a 10 años a marcar su valor más bajo desde la puesta en marcha del euro.

Entre las Bolsas europeas, el selectivo español Ibex 35 se situaba entre los menos castigados con un recorte del 0,4% a primera hora, aunque a medida que avanzaba la jornada ha ido aumentando las pérdidas hasta liderar las caídas del resto. Con la apertura a la baja de Wall Street, ha llevado las pérdidas más allá del 3%, lo que le ha hecho perder el nivel psicológico de los 10.500 puntos con todos sus valores en rojo. "La Fed, de alguna manera, ha reconocido que la economía está ralentizándose y lo cierto es que hay un cierto pesimismo respecto al crecimiento", ha explicado Nicolás López, director de análisis y de mercados de M&G Valores. Entre los grandes, BBVA se ha dejado un 4,59%, el Santander un 4,39% y Telefónica un 2,08%.

Frente al movimiento observado en la renta variable, en los mercados de deuda secundaria la tónica dominante tras el correctivo de ayer era la calma y un leve alivio de la presión sobre los títulos de España. De hecho, la rentabilidad de los bonos del Tesoro a 10 años bajaba 5 puntos básicos a media mañana. Sin embargo, el apetito por sus homólogos alemanes, de referencia por su estabilidad y cuyos intereses bajaban 6 puntos básicos a la misma hora, ha impedido que la mejora se trasladase a la prima de riesgo, el diferencial entre ambos, que transitaba en torno a los 165 puntos básicos, dos más que ayer.

En cuanto al euro, aunque el dólar se ha depreciado frente al yen por las dudas sobre la economía estadounidense, no ha pasado lo mismo frente a la divisa europea, que bajaba a 130 dólares. Tras el repunte de la moneda común de las últimas jornadas, parece que la pauta en este caso ha sido la de hacer caja y mantenerse a la expectativa.