_
_
_
_
_
La crisis del euro

Cuatro grupos pujan por la eléctrica portuguesa EDP

Antes de que termine el año, el Gobierno del conservador Pedro Passos Coelho confía en firmar el contrato de venta del 21,35% de las acciones de la compañía

Portugal ultima la reprivatización de su principal compañía eléctrica, Energías de Portugal (EDP), participada en la actualidad en un 26% por el Estado. Antes de que termine el año, el Gobierno del conservador Pedro Passos Coelho confía en firmar el contrato de venta del 21,35% de las acciones por el que Portugal se embolsará, según determinadas previsiones, entre 2.300 y 2.700 millones de euros.

El plazo para presentar ofertas se cerró el lunes. Hay cuatro en pie. La primera pertenece al grupo alemán E.ON. Es la única oferta de un grupo industrial independiente y privado, no controlado por ningún Estado. De cualquier forma, The Financial Times reveló el lunes que la canciller alemana Angela Merkel intercedió por la empresa alemana en la pasada cumbre europea de Jefes de Estado y de Gobierno en Bruselas ante Passos Coelho.

Más información
"Cumplir los compromisos es la obsesión de todo Portugal"
La UE y el FMI imponen a Portugal duros recortes sociales para el rescate

El segundo de los grupos que pugna por hacerse con el control de la eléctrica portuguesa es el chino Three Gorges (Tres gargantas), en manos del Estado chino. Es, según la prensa portuguesa, quien ofrece más dinero por acción. El tercero de los grupos es el brasileño Eletrobras, controlada por el Estado brasileño, que ya se ha asociado en algunas ocasiones con la eléctrica portuguesa. El diario económico portugués Jornal de Negócios aseguraba ayer que la compañía española Iberdrola -que ya regenta un 6,7% de acciones de EDP en la actualidad- acudía a la puja en alianza con Eletrobras, extremo que la empresa española ha negado. La cuarta compañía en disputa, la más pequeña, es también brasileña: Cemig, de la que el Estado brasileño también dispone del 51%.

La venta de EDP se inscribe en el programa de privatizaciones exigido por la troika, esto es, por el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Central Europeo (BCE) y la Unión Europea (UE), instituciones que en mayo salieron al rescate de Portugal prestándole 78.000 millones de euros para evitar la bancarrota. Dentro de este programa se cuenta también la privatización de Redes Energéticas Nacionales, especializada en el almacenamiento y transporte de la energía eléctrica, la aerolínea nacional TAP, la petrolera GALP o los Correios de Portugal, esto es, los servicios portales portugueses.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_