El PP condena las agresiones pero exige explicaciones por la ausencia de Peces-Barba

La secretaria ejecutiva de Política Social y Bienestar del Partido Popular, Ana Pastor, ha condenado hoy la actitud agresiva de ciertos ciudadanos durante la manifestación que ayer recorrió el centro de Madrid convocada por la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT). Pese a esta condena, ha exigido al Ejecutivo que explique la ausencia en dicha concentración del Alto Comisionado de Apoyo a las Víctimas, Gregorio Peces-Barba, por estimar que tiene "la obligación de representar las inquietudes de las víctimas".

Pastor se ha preguntado: "¿Para qué se ha nombrado a Peces-Barba si no asiste a acontecimientos como la manifestación cuando su primera obligación es estar al lado de las víctimas?. ¿Puede tomar realmente decisiones que afecten a tantas personas?". A su juicio, el presidente José Luis Rodríguez Zapatero debe explicar a los ciudadanos por qué no estuvo el principal representante de "todos los problemas y las inquietudes de las víctimas del terrorismo" a su lado durante la manifestación.

Además, ha insistido en que "la sociedad española sigue estando con todas las víctimas del terrorismo y una vez más se pudo constatar ayer en las calles de Madrid". "El Gobierno debe tomar buena nota de los que decían los ciudadanos", ha recalcado Pastor.

Comportamiento "ruin y miserable"

La condena del PSOE ha sido más contundente que la del PP al tachar de "ruin y miserable" que un grupo de "derechistas exaltados" convirtieran una manifestación de apoyo a las víctimas del terrorismo en un acto "contra el presidente del Gobierno y su política".

Así lo ha asegurado en rueda de prensa el portavoz socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, que ha aclarado que su formación acudió al acto invitada por la plataforma convocante, la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT). "Lo hicimos como siempre lo hemos hechos y lo seguiremos haciendo, por el respeto, el aprecio y la solidaridad para con las víctimas del terrorismo".

Pérez Rubalcaba ha lamentado que la marcha finalmente no resultara "pacífica y una muestra de unidad" porque "un conjunto de derechistas exaltados que fueron a manifestarse contra los violentos se acabaran comportando como ellos". Respecto a la ausencia en la marcha del Alta Comisionado de Apoyo a las Víctimas del Terrorismo, Gregorio Peces-Barba, cuya presencia ha exigido el PP, el portavoz socialista la ha considerado "comprensible", dado el "perfil" que el rector pretende dar a su cargo.

Un reflejo de "la crispación de la sociedad"

Las agresiones que ayer sufrieron varios miembros del Gobierno y del PSOE en la manifestación de apoyo a las víctimas del terrorismo son reflejo de la "crispación de la sociedad" por la ausencia del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y del Alto Comisionado, Gregorio Peces Barba. Así lo ha asegurado hoy el presidente de la Asociación Víctimas del terrorismo (AVT), José Alcaraz, que convocó la marcha.

Alcaraz ha reconocido, eso sí, que los incidentes fueron "deplorables". El ministro de Defensa, José Bono, tuvo que abandonar la manifestación tras ser agredido, golpeado en las costillas y haber logrado evitar que el mástil de un bandera le golpeara. El titular de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, fue blanco de constantes improperios. La eurodiputada socialista Rosa Díez se marchó del lugar llorando. Al término de la manifestación, muchos de los agitadores se fueron ante la sede del Grupo PRISA y la Cadena SER para continuar con sus insultos.

El presidente de la AVT ha calificado de "lamentables" las agresiones contra Bono. "Estaba fuera de nuestro alcance, no teníamos referencias de lo que estaba pasando", se ha justificado Alcaraz. En este sentido, ha asegurado que los incidentes fueron "aislados" y protagonizados por un grupo de exaltados. Pero la sensación de Bono es bien distinta, que ha indicado en una entrevista esta misma mañana que tuvo la impresión de que quienes le abucheaban y amenazaban eran mayoría entre los que estaban a su alrededor.