El mundo del espectáculo se une para apoyar a las víctimas de Darfur
Este domingo, militantes en pro de los derechos humanos voltearán relojes de arena con un líquido del color de la sangre para conmemorar el "día mundial a favor de Darfur",
Una coalición internacional de conocidos actores y músicos, entre ellos Mick Jagger, Elton John, Matt Damon y George Clooney, ha publicado un llamamiento en el que insta a la comunidad internacional a hacer más para proteger a los civiles en Darfur. Los artistas, entre los que están también Hugh Grant, Mia Farrow, Don Cheadle, Alex James, Mark Knopfler y Bog Geldof, acusan al mundo de haber permanecido cruzado de brazos mientras "más de doscientos mil civiles eran masacrados" en los desiertos de esa región del Sudán.
En su declaración, con motivo del cuarto aniversario del inicio del conflicto, se pide a la comunidad internacional que tome medidas urgentes y "decisivas" para "poner freno a los responsables de tales atrocidades". "Mientras se persigue un proceso político a largo plazo, tiene que haber un alto el fuego inmediato, debe ponerse fin a los ataques contra civiles y permitirse pleno acceso a las agencias humanitarias", agrega la nota.
El llamamiento de esos artistas se produce mientras continúa deteriorándose la situación en esa región y el Gobierno de Sudán se niega al despliegue de una fuerza de mantenimiento de la paz que pueda resultar realmente eficaz.
Este domingo, señalado como "día mundial a favor de Darfur", en distintas partes del mundo, desde Estados Unidos hasta Mongolia y Ucrania, militantes en pro de los derechos humanos voltearán relojes de arena con un líquido del color de la sangre. Se trata, según los organizadores, de transmitir el mensaje de que "cada segundo de demora es un segundo en el que habrá más sangre derramada".
En los cuatro últimos años, el conflicto de Darfur, que se ha extendido a otros dos países - Chad y la República Centroafricana-, ha llevado a dieciséis resoluciones de la ONU, que no se han cumplido. Más de doscientas mil personas han perdido la vida, otras 230.000 se han visto obligadas a huir del país, dos millones se han quedado sin techo y el conflicto ha arruinado la vida a más de cuatro millones.
