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Incidentes entre neonazis y antifascistas

Rubalcaba: "Las leyes son las leyes"

Interior dice que "no es infrecuente" que Delegación de Gobierno prohíba actos ultras que luego el TSJM autoriza.- Mestre estudia cómo desautorizar la manifestación ultraderechista del sábado

Tras la muerte de un joven antifascista ayer en Madrid, la gran pregunta es cómo se permitió que se celebrara una manifestación de claro contenido xenófono, que el joven al parecer iba a reventar. Tanto el Ministerio del Interior como la Delegación del Gobierno han justificado que se autorizara la protesta, convocada por Democracia Nacional (DN), al tratarse de un partido legal. "Las leyes son las leyes y la gente tiene derecho a manifestarse", ha subrayado Alfredo Pérez Rubalcaba, para añadir que "no es infrecuente" que la Delegación del Gobierno no autorice solicitudes de manifestación de grupos ultraderechistas y que luego prosperen los recursos que éstos presentan ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM).

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Además, el ministro ha aludido a lo que ocurrirá en la capital de España "en los próximos días", en alusión a una convocatoria de Alianza Nacional y otra de celebración del 20-N, protagonizada también por grupos ultras. El titular de Interior ha incidido, en todo caso, en que la agresión fatal se produjo en el interior del Metro y no durante la manifestación, que por otra parte estaba "autorizada". "Las leyes son las leyes, a uno le pueden gustar unas manifestaciones más que otras, pero la gente tiene derecho a manifestarse", ha añadido. Con todo, Rubalcaba ha anunciado que se extremarán las medidas de "precaución" para evitar que este tipo de manifestaciones deriven en incidentes.

"Lo hacemos habitualmente y la prueba es que hay manifestaciones de éstas con relativa frecuencia y no han salido en la prensa porque no ha pasado nada", ha proseguido Rubalcaba. Por su parte, la delegada del Gobierno en Madrid, también ha subrayado que la muerte se produjo "de camino a la manifestación" contra la inmigración convocada por Democracia Nacional (DN) y no durante ésta y ha subrayado que no es "una agresión racista", puesto que la víctima "es española", sino "ideológica". Mestre ha hecho hincapié que la manifestación estaba autorizada al tratarse de un partido legal que, por tanto, "tiene pleno derecho a manifestarse".

A manifestarse con un machete

De hecho, ha argumentado que la Delegación pidió hace tiempo la ilegalización de una protesta de Falange Española y los tribunales la desautorizaron. En todo caso, Mestre ha indicado que la manifestación con motivo del aniversario de la muerte de Franco "podría ser prohibida si la legalidad lo permite". La marcha, de celebrarse finalmente, transcurrirá por las calles de Montera, Gran Vía y Puerta del Sol. "En el marco de la Ley Orgánica de derecho a manifestación veremos las posibilidades de hacer lo que tengamos que hacer, sobre todo con el precedente de ayer", ha dicho Mestre, para agregar que de aquí al 20-N "se redoblarán los esfuerzos policiales", ante el temor de que se multipliquen los enfrentamientos entre ultras y antifascistas.

En este sentido, CC OO de Madrid ha reclamado que se prohíban los actos de la extrema derecha porque sólo sirven para fomentar el racismo y la violencia. El sindicato ha expresado su "preocupación ante el auge de la violencia de extrema derecha y ante la impunidad con la que actúa". En la misma línea, el secretario general de la Federación Estatal de Asociaciones de Inmigrantes y Refugiados (FERINE), Efraín Pardo, ha manifestado su "preocupación" por los casos de racismo y ha avisado de que los grupos de extrema derecha "están más activos". "Son muy violentos, van armados y atacan a cualquiera, sea inmigrante o no". Por estos motivos, esta asociación reclama al Gobierno que no autorice concentraciones como la de ayer. También la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM) ha pedido la ilegalización de las organizaciones que alientan la xenofobia, así como la prohibición de las manifestaciones que promueven estos grupos.

El asesinato del joven es, en su opinión, "consecuencia de la manifestación". La FRAVM dice no entender cómo organizaciones que fomentan la violencia y odio racial pueden difundir en las calles de Madrid con total impunidad su mensaje intolerante, ya sea a través de carteles, más que visibles en ciertas zonas, o con actos como el de ayer. La Coordinadora Antifascista de Madrid ha criticado que "con la supuesta democracia en la que vivimos" haya "manifestaciones racistas permitidas y protegidas por las autoridades" pese a que su asistentes "son sujetos armados con puñales de caza". El alcalde, Alberto Ruiz-Galladón, ha declarado que no consentirá que en la capital "se instale la violencia, la intransigencia y la intolerancia". Gallardón ha aprovechado un acto público para expresar, en nombre de todos los madrileños, el "dolor" de la ciudad por el asesinato. El portavoz del Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Madrid,

David Lucas, ha expresado su "pesar" y ha dicho que "ninguna ideología de carácter violento" debe romper la convivencia.

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