Los vecinos impiden desalojos en el poblado de Las Mimbreras
Reciben a la policía municipal con barricadas y piedras.- No hay heridos ni detenidos
La Policía Municipal acudió la mañana del miércoles a cumplir la orden de desalojo que pendía sobre algunas infraviviendas del poblado de Las Mimbreras, situado en el madrileño distrito de Latina. Un grupo de unos 40 vecinos les estaban esperando y les recibieron con barricadas de neumáticos y una lluvia de piedras. Ante esta situación, pidieron refuerzos, una llamada a la que acudieron 12 furgonetas de antidisturbios.
Los antidisturbios cargaron contra los vecinos, la mayoría de etnia gitana, que se refugiaron en sus casas. No se registraron heridos y finalmente no se hicieron efectivos los desahucios. Tampoco ha habido detenidos, según ha informado la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
Según los afectados, el Ayuntamiento pretende desalojar a 20 de las 130 familias que allí habitan. Antonia Heredia, una de las afectadas por la orden judicial, ha señalado que los residentes del poblado no van a permitir que la Policía les eche a la calle, y ha asegurado que están dispuestos a "ir a la guerra". "Nos quieren echar a la calle con mujeres embarazadas y niños. Vienen con escopetas a tirar nuestras casas. No lo vamos a permitir, esto no se puede aguantar", ha afirmado Heredia.
Diez días para presentar alegaciones
Otros vecinos han explicado que en concreto hoy se pretendía el desalojo de una vivienda, habitada por un joven matrimonio de etnia gitana y sus dos hijos. Otros habitantes de la zona, en la que hay chabolas pero también casas de ladrillo, han mostrado una carta del Ayuntamiento de Madrid en la que se les daba un plazo de diez días para presentar alegaciones a una orden de desalojar sus viviendas.
Fuentes municipales han asegurado que no tenían constancia de que fuera a haber desalojos en el día de hoy. Por su parte, la Jefatura Superior de Policía de Madrid ha indicado que los agentes habían acudido a Las Mimbreras porque un grupo de unas 40 personas estaban tirando piedras desde un puente de la M-40, que está pegado a este asentamiento. Las mismas fuentes han añadido que los disturbios se han producido en el marco de "una labor de seguridad ciudadana",
El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, prometió desmantelar éste y otros cuatro poblados de la capital -La Quinta, Cañaveral, Pitis y Puerta de Hierro- en su programa electoral de 2003.
